Casi la mitad de españoles estaría a favor de volver al confinamiento si la segunda ola se descontrola

La mitad de la población española estaría de acuerdo en volver a proclamar el Estado de Alarma si la ‘segunda ola’ de COVID-19 se generaliza y descontrola, mientras que un 43 por ciento aprobaría confinar de nuevo a toda la población, según los resultados de la segunda ronda del estudio ‘COSMO-SPAIN’, que coordina el Instituto de Salud Carlos III (ISCIII) desde el Centro Nacional de Epidemiología (CNE) y que está impulsado por la Organización Mundial de la Salud (OMS).

La medida con más aceptación en caso de segundo brote generalizado sería ‘unificar la normativa y las restricciones a nivel nacional’, con un 63 por ciento de la población totalmente de acuerdo, seguida de ‘confinar las zonas más afectadas’ (62 por ciento).

Según los resultados, las medidas adoptadas durante la pandemia que mayor acuerdo generan son el uso obligatorio de mascarilla (80 por ciento de acuerdo) y las restricciones de aforo y horario en bares, restaurantes y locales de ocio: únicamente un 10 por ciento de la población dice estar en desacuerdo con las restricciones de aforo en bares y restaurantes, mientras que un 14 por ciento no está de acuerdo con esta medida.

El 42 por ciento de los encuestados está de acuerdo con la apertura de los centros educativos. Mantener la libertad de movimientos entre provincias se consideraba una buena medida para el 40 por ciento, pero el movimiento libre entre países genera más desacuerdo.

Sobre la vacunación, en la ronda 1, realizada a finales de julio, el 70 por ciento de los encuestados decía estar de acuerdo en vacunarse de forma inmediata si ya hubiera una vacuna disponible y estuviera indicada por las autoridades. En esta segunda ronda, el porcentaje desciende y se sitúa en un 43 por ciento. Entre las razones que las personas encuestadas arguyen son ‘riesgos para la salud’ (59 por ciento) y ‘creo que no será eficaz’ (16 por ciento).

Con respecto al uso de una aplicación gratuita de rastreo para el teléfono móvil que le advirtiera si puede haber sido infectado con el COVID-19, el porcentaje de la población que dice que se la descargaría se mantiene en más del 55 por ciento.

EL 60% TIENE MUCHA PREOCUPACIÓN POR EL COVID-19

La preocupación de la población respecto a la pandemia sigue siendo elevada: el 60 por ciento de las personas participantes indican ‘mucha o muchísima’ preocupación por la COVID-19. En todo caso, el nivel de preocupación ha disminuido respecto a la encuesta anterior, e incluso ha aumentado levemente el porcentaje de encuestados que dicen que el virus y la enfermedad les preocupa ‘poco o nada’.

Las principales preocupaciones se mantienen similares a la ronda anterior (posible saturación de servicios sanitarios, gente que no utiliza mascarilla, hipotéticos nuevos confinamientos), pero aumentan la preocupación por la situación económica y laboral: por ejemplo, a uno de cada dos encuestados le preocupa mucho poder perder su trabajo.

Además, situaciones que preocupaban menos a la población en la primera ronda del estudio (realizada entre el 27 de julio y el 3 de agosto), como la salud física y mental, salir a la calle o el cierre de centros educativos, han aumentado en esta segunda ronda.

En general, la percepción de la población sobre la evolución de la pandemia ha empeorado: un 47 por ciento de los encuestados cree que lo peor de la pandemia está por venir y un 31 por ciento que ahora (por finales de septiembre) se está viviendo lo peor. Sin embargo, la percepción sobre la gravedad que tendría la enfermedad en caso de contagiarse ha descendido: un 39 por ciento considera que sería ‘grave o muy grave’, frente a un 43 por ciento de la encuesta anterior, y solo un 27 por ciento de la población cree que sus probabilidades de contagio son elevadas o muy elevadas.

Por otro lado, ha aumentado un 5 por ciento la población que percibe como ‘difícil o muy difícil’ evitar el contagio y la infección. En torno a un 75 por ciento de los participantes considera que existe una alta probabilidad de contagio en sitios concurridos en espacios cerrados; la percepción del riesgo se reduce cuando el sitio, a pesar de ser concurrido, es un espacio abierto (52 por ciento). Utilizar el transporte público, reunirse con familiares o amigos en casa o acudir a un centro sanitario siguen siendo situaciones en las que la precepción del riesgo de contagiarse es alta. Además, el 48 por ciento de la población cree que es probable contagiarse en los centros educativos y el 45 por ciento al trabajar presencialmente.

CONOCIMIENTOS SOBRE EL CORONAVIRUS

Por lo general, el conocimiento sobre las formas de contagio es adecuado y se mantiene alto. Sobre el uso de la mascarilla, el conocimiento ha ido mejorando a lo largo del tiempo, pero sigue habiendo un 9 por ciento que cree que hay que quitarse la mascarilla para toser o estornudar. Por otro lado, el 95 por ciento de la población sabe que si tiene síntomas debe quedarse en casa.

A las preguntas sobre qué harían en caso de ser contacto estrecho de un positivo, el 74 por ciento llamaría inmediatamente al centro de salud o al teléfono de información para seguir sus indicaciones, y el 54 por ciento se aislaría inmediatamente. Sin embargo, un 17 por ciento se aislaría en casa pero no de su familia, y un 12 por ciento dice que haría vida normal. Un 3 por ciento de la población admite que no sabe lo que debería hacer.

Un 78 por ciento de los encuestados refiere que le es fácil o muy fácil encontrar información que necesita, y más del 80 por ciento afirma que le es fácil o muy fácil entender y seguir las recomendaciones. La dificultad percibida aumenta al valorar cuándo hay que ir al médico por un problema sin relación con el coronavirus, y al evaluar si la información que dan los medios de comunicación es fiable.

La adherencia a las medidas preventivas recomendadas por las autoridades sanitarias sigue siendo alta. Durante la semana previa a la encuesta, las medidas de prevención que la población dice haber realizado ‘siempre’ siguen siendo por este orden: usar mascarillas (90 por ciento), lavarse las manos y/o usar gel hidroalcohólico (85 por ciento), ventilar los espacios cerrados (84 por ciento) y guardar distancia física (80 por ciento). El 72 por ciento considera que evitar el transporte público es una medida preventiva, y el 68 por ciento dice haber evitado las reuniones sociales y familiares.

Algo más del 40 por ciento de la población busca información sobre el virus y la enfermedad entre 4 y 5 veces al día. Las fuentes de información consultadas han variado poco: telediarios, internet y prensa siguen siendo las fuentes de información más consultadas, mientras que la información procedente de los profesionales sanitarios, la OMS y el Ministerio de Sanidad continúan siendo las que más confianza generan.

Una vez más, las redes sociales se consultan bastante, aunque se confía poco en ellas; lo mismo ocurre con los programas de debate de radio y televisión. En este sentido, preguntadas sobre la confianza que les generan distintas instituciones, las personas encuestadas confían más en los científicos (69 por ciento), hospitales (58 por ciento) y centros de salud (54 por ciento).

La investigación, que comenzó antes de verano, presentó en julio sus resultados preliminares, y en agosto los resultados de la primera ronda. En esta segunda ronda han participado 1.057 personas residentes en España, mayores de 18 años, con un 49,6 por ciento de hombres y 50,4 por ciento de mujeres. La encuesta se realizó entre el 22 y 25 de septiembre. El trabajo se está llevando a cabo en otros 31 países. ‘COSMO-SPAIN’ está coordinado por el Instituto de Salud Carlos III, en colaboración con el Ministerio de Sanidad, la OMS, la Universidad de Murcia y la Universidad de Cádiz.