Quién no se acuerda de esos largos viajes a la sierra por la carretera general con 8 ó 9 miembros de la familia montados a tropel unos encima de otros, sobre la caja de cambios, o el asiento de la madre, sin cinturón de seguridad ni nada parecido. O quién no hizo alguna vez el truco de calentar el termómetro en el radiador hasta hacerlo estallar para simular 40 de fiebre y evitar ir al colegio. O esa costumbre insana de quemar las nubes de goma para acentuar su sabor. ¡Ni idea de que eso fuese cancerígeno!
Os invitamos a repasar una lista, a partir de una hecha por los nostálgicos de Yo fui a EGB, que, sin duda, te hará revivir tiempos pasados.
3Ir en bici sin casco
Ir en bici sin casco: Y quien dice en bici, dice en patines, en moto… Era lo que se llevaba en la época, ¡qué le vamos a hacer! Nadie se ponía el casco. De hecho, no sabíamos ni lo que era eso. Bajábamos a toda velocidad por cuestas pedregosas sin frenos y, si hacía falta, desgastábamos nuestras zapatillas Victoria a base de frenadas improvisadas. Siempre lo pienso: ¡qué poco nos pasaba para lo que nos podía haber pasado!
Las caídas en bici quedaban en simples raspones, culetazos o heridas que, como mucho, iban a tirita y hasta otro día.
