Cada vez más personas se suman a una tendencia que, hasta hace no tanto, parecía reservada a unos pocos. Ya sea por salud, porque toca conducir, porque se busca reducir el consumo de alcohol o simplemente por gusto, lo cierto es que las cervezas sin alcohol —y más específicamente, las 0,0%— han ganado terreno en bares, reuniones y estanterías de supermercados. Hoy, representan nada menos que el 16% del consumo total cervecero en España. Pero ¿sabemos realmente qué estamos bebiendo cuando elegimos una cerveza 0,0%?
La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) se propuso arrojar luz sobre este universo en expansión y realizó un análisis minucioso de 23 cervezas tostadas 0,0% disponibles en el mercado. Los resultados, lejos de ser anecdóticos, nos permiten entender mejor qué estamos consumiendo, qué marcas sobresalen y por qué el precio no siempre es una garantía de calidad.
1Una alternativa en crecimiento que ya no es solo para conductores

Beber cerveza sin alcohol ha dejado de ser una excepción para convertirse en una elección legítima, incluso deseada. Cada vez más personas buscan opciones que acompañen sus comidas o momentos sociales sin necesidad de consumir alcohol. En este contexto, las cervezas 0,0% —aquellas cuyo contenido alcohólico se reduce a niveles casi imperceptibles— se posicionan como una de las opciones más elegidas.
Según el análisis de la OCU, el fenómeno va mucho más allá de una moda pasajera: ya es una categoría consolidada dentro del mercado cervecero nacional. Y no hablamos de una sola variedad. En esta ocasión, el estudio se centró específicamente en las cervezas tostadas 0,0%, una alternativa que promete un sabor más intenso y maltoso, ideal para quienes buscan experiencias más cercanas a la cerveza tradicional.