En los últimos años, instalar placas solares en casa ha dejado de ser una extravagancia para convertirse en una opción accesible y cada vez más popular entre los españoles. El impulso por reducir la factura de la luz y apostar por la sostenibilidad energética ha provocado un auge de soluciones domésticas más asequibles. En este escenario, Lidl irrumpe con una propuesta que ha sorprendido al mercado: un kit solar completo, enchufable y con tecnología avanzada, por menos de 300 euros.
Con la promesa de transformar balcones y terrazas en pequeñas centrales solares, Lidl pone al alcance de cualquier hogar la posibilidad de generar energía propia. Pero, ¿realmente es una opción viable? ¿Qué ventajas tiene y hasta qué punto es eficiente? En este artículo analizaremos en profundidad esta nueva apuesta de la cadena alemana, cómo funciona su kit solar y qué significa esto para el futuro energético de miles de hogares.
1Lidl: una solución solar lista para usar desde el balcón

Lidl ha apostado por la sencillez. Su propuesta no requiere obras, ni técnicos, ni permisos especiales. Se trata de un kit de placas solares que cualquier persona puede instalar directamente desde su casa. Consta de dos paneles fotovoltaicos ligeros, un microinversor con módulo WLAN integrado, el soporte para montaje y un cable para conexión directa a la red eléctrica doméstica.
Este conjunto, denominado como “kit solar para balcón enchufable de 400W”, tiene una potencia pico de 360 vatios (Wp) y puede comenzar a producir electricidad con solo conectarlo a una toma de corriente convencional de 230V. Una alternativa muy atractiva para quienes no disponen de tejado propio, pero sí de una barandilla, balcón o terraza soleada.
El microinversor juega aquí un papel esencial. Este componente transforma la corriente continua generada por los paneles en corriente alterna compatible con la red de casa. En pocas palabras, lo que produces se consume directamente. Y si generas más de lo que consumes, la energía sobrante se vierte en la red general, aunque sin compensación económica a menos que se tramite un acuerdo con la distribuidora eléctrica.