La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha convocado a la ciudadanía a participar en una manifestación internacional este sábado en la Puerta del Sol de Madrid. El objetivo de esta movilización es expresar el rechazo del gobierno español al régimen de Nicolás Maduro en Venezuela, al que Ayuso ha calificado como una «narcodictadura» que está causando un «exilio y empobrecimiento masivo» en el país vecino.
Ayuso ha lamentado que la izquierda política española se encuentre «secuestrada por los intereses» de líderes como José Luis Rodríguez Zapatero, lo que impide que España asuma el papel histórico y político que le corresponde con la nación hermana de Venezuela. En este sentido, la presidenta madrileña ha sido enfática al señalar que «no se puede pactar ni blanquear» al gobierno de Maduro.
El Llamado a la Unidad y el Deber Histórico de España
La presidenta madrileña ha hecho un llamado a la unidad de toda España en torno a esta convocatoria, argumentando que «lo que está sucediendo en Venezuela nos compete a todos». Ayuso considera que nuestro país tiene una deuda «histórica, social y política» con los países de Hispanoamérica, «que somos lo mismo», y por ello debe situarse «a la cabeza de la libertad y la democracia» en defensa de Venezuela.
La manifestación del sábado será internacional, lo que demuestra el alcance de la crisis venezolana y la necesidad de una respuesta global. Ayuso ha cuestionado retóricamente: «Si no lo hace España y no se pone España la cabeza, ¿Quién lo va a hacer?», dejando claro que espera una firme posición del gobierno español frente a la «narcodictadura» de Maduro.
Un Llamado a la Acción Frente a la «Narcodictadura» de Maduro
La presidenta madrileña ha sido enfática en su rechazo al régimen de Maduro, calificándolo como una «narcodictadura» que está provocando un «exilio y empobrecimiento masivo» en Venezuela, con «miles de detenidos y muertos en las calles». Ante esta situación, Ayuso ha hecho un llamado a «todo el mundo» a participar en la manifestación del sábado, como una forma de expresar el apoyo de España a la lucha por la democracia y la libertad en el país vecino.
Ayuso ha lamentado que la izquierda política española se encuentre «secuestrada» por los intereses de líderes como Zapatero, lo que impide que España asuma el papel que le corresponde. Sin embargo, la presidenta madrileña ha sido enfática al señalar que «esto no nos puede dejar fuera, en la cuneta», y que nuestro país tiene el deber histórico de situarse «a la cabeza de la libertad y la democracia» en defensa de Venezuela.