Santiago Segura y la formula McDonalds en el cine

Entre ‘Vacaciones de verano’, ‘Padre no hay más que uno’ junto a sus dos secuelas y las dos ‘A todo tren’, ver la reinvención de Santiago Segura como un actor cómico que apunta a toda la familia es algo extraño. Tras explotar en la fama con la brillante ‘Día de la Bestia’ de Alex de la Iglesia y después con su propia serie ‘Torrente’, una serie de películas que saltan entre ser sátiras brillantes y ser profundamente estúpidas (Torrente casi por accidente terminó siendo un cruce español entre Borat y Austin Powers), el actor ha conseguido un nicho permanente en la cartelera veraniega.

Pero es decepcionante. Segura no ha sido nunca, ni de cerca, un autor demasiado ambicioso, incluso el filo satírico de Torrente se va perdiendo a medida que avanzan las cintas, apuntando al mínimo común denominador en la audiencia. Pero al menos en su momento se atrevía a colaborar con cineastas que sacaban piezas interesantes de su particular personaje en escena con colaboraciones con figuras como Alex de la Iglesia, Guillermo del Toro o Fernando Trueba. Había una personalidad única en su trabajo tanto delante como detrás de la cámara. (Es bueno recordar a estas alturas del texto que es el tres veces ganador del Goya Santiago Segura). 

Por eso es que ha sido tan estresante ver su trabajo desde el estreno de la primera ‘Padre no hay más que uno’. Es que sus últimos 6 trabajos como actor y director son básicamente la misma película, en donde hace del torpe pero amoroso padre que debe adaptarse a una nueva situación con sus hijos, algunas crisis que son su culpa y otras que no, que al final demuestra que quiere a los chicos. Risas en el camino, y quizás una o dos escenas sentimentales. Que no sé malentienda, funciona, y en plena crisis llena las salas. 

Es entretenimiento creado por la misma fórmula que se hace una hamburguesa de McDonal’s o de Burguer King, pero hay que señalar que, al igual que la comida rápida, Santiago Segura tiene un producto que se vende. Incluso en un 2020 donde buena parte del público tenía miedo de entrar a las salas ‘Padre no hay más que uno 2’ recaudo casi 13 millones de euros en taquilla y le permitió una bocanada de oxígeno a los cines.

LA COMODIDAD DE LO CONOCIDO

El tema es que lo que funciona de estas películas, lo que atrae al público a volver una y otra vez a las salas, es saber exactamente lo que van a ver. Es lo mismo que a nivel internacional a Marvel ser un fenómeno eterno de taquilla y a Adam Sandler en uno de los actores más exitosos de todos los tiempos, pero que Marvel al menos tiene su lado extraño en ‘Los Guardianes de la Galaxia’ y Sandler de vez en cuando colabora con un Paul Thomas Anderson (Embriagado de amor) o unos hermanos Safdie (Diamantes sin Cortar). En cambio, Santiago Segura no parece atreverse nunca a tomar un riesgo artístico. 

Es que el problema no es que haga este tipo de comedias familiares que a su modo entran dentro del cine algoritmo que dice Alejandro Calvo, sino que ahora sea lo único que hace. Recuperar un poco del bicho raro que salía en las cintas de Alex de la Iglesia, o que conectaba el cine fantástico de Guillermo del Toro con el sentido del humor sería una buena noticia para el cine español, que además podría conseguir un altavoz para producciones fuera de la línea típica que atrae a los espectadores.

Esto también termina golpeando su imagen. Jim Carrey es un mito por ‘La Mascara’ y ‘Ace Ventura’ pero también por ‘¡Olvídate de mí!’, pero cada vez se reconoce más a Segura por esta etapa mucho menos interesante que su trabajo con Alex De La Iglesia o incluso Torrente. 

SANTIAGO SEGURA SIGUE EN LA MISMA FÓRMULA

Pero por su lado el protagonista de ‘Vacaciones de verano’ sigue a lo suyo. De momento la cinta, que vale decir no tiene conexión en la trama como las ‘Padre no hay más que uno’ ni ‘A todo tren’, apunta a ser otro éxito del verano, lo que en el fondo no es mala noticia para los cines. Pero sigue siendo una mala noticia desde el lado artístico que un actor y comediante que da para más se repita al cansancio. Nadie pide una estrella Michelin, pero sí que se puede pedir algo que no sea otra Big Mac.