España es el segundo país con mayor índice de caída del pelo del mundo con un 42,79% de los casos, solo superado por República Checa, seguido de Alemania, Francia y Reino Unido. Esto se destacó en un estudio de observación realizado en 2011 por Tripadvisor, que clasificó a China en la parte inferior de las clasificaciones de hombres y mujeres, con solo el 20% sufriendo pérdida de cabello.
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La temida pérdida de pelo
La pérdida de pelo tiene muchas causas, pero un estudio publicado en el American Journal of Physical Anthropology mostró un vínculo entre el vello corporal abundante y la alopecia androgénica en los hombres, especialmente en los países mediterráneos.
Según otro estudio, esta vez realizado por la Universidad de Pensilvania y publicado en la revista Science Translational Medicine, el principal factor de la alopecia androgenética, o calvicie de patrón masculino, es la testosterona, que al convertirse en hormonas dihidrotestosterona (DHT) provoca la caída del cabello.
Pero recuerda que la caída diaria del cabello es normal, por lo que no debemos preocuparnos si ocurre, porque el cuerpo tiene mecanismos para reponerlo. «La gente pierde de 50 a 100 cabellos al día», explica el Dr. Blas González, dermatólogo de la Clínica CreuBlanca de Barcelona.
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Generalmente no nos preocupamos por ello
Pero por lo general, no se toma en serio porque crece el cabello nuevo al mismo tiempo que lo mudamos. De hecho, tanto hombres como mujeres pierden grosor y volumen del cabello a medida que envejecen, pero la verdadera pérdida de pelo ocurre cuando el pelo nuevo no reemplaza el que se pierde. “La verdadera caída del cabello se produce cuando el cabello nuevo no reemplaza al pelo perdido”, Blas González, dermatólogo de Clínica CreuBlanca
El doctor explica que la razón principal por la que los hombres pierden más cabello que las mujeres es precisamente por la DHT, “una hormona derivada de la testosterona que incide directamente en la caída del pelo. Debido a que las mujeres tienen niveles más bajos de testosterona, este proceso es significativamente menor”.
Además, «cuando estamos genéticamente predispuestos a la caída del pelo, la hormona DHT se une a los receptores en los folículos pilosos (donde se produce el pelo), lo que hace que se encojan, se debiliten y eventualmente mueran. Al hacerlo, el proceso finalmente detiene el crecimiento del cabello, por causa de los de los folículos, explicó el médico.
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Antecedentes famiiares
Aunque los antecedentes familiares son la causa más común de pérdida de cabello, otros factores a veces pueden contribuir a la pérdida de cabello, según González, como los cambios hormonales que pueden ocurrir durante el embarazo, la menopausia o los trastornos de la tiroides, la anemia o las condiciones de deficiencia y ciertas condiciones médicas pueden causar la caída del pelo, tanto ocasional como permanente.
“Algunos medicamentos y procedimientos, como la radioterapia, también pueden ser desencadenantes”, prosigue la doctora de CreuBlanca, quien también advierte que “las situaciones de estrés pueden provocar no sólo la caída del pelo, sino también la caída del pelo”.
En definitiva, recuerda González, “no nos dimos cuenta de lo importantes que son los nutrientes para la salud del pelo y que es necesaria una dieta equilibrada rica en antioxidantes”, incluyendo todos estos alimentos que evitan la caída del pelo cuando sea posible.
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Kiwi
Según el nutricionista de CreuBlanca, Xavier González, la vitamina C, que se encuentra en alimentos como el kiwi, las fresas, los cítricos y especialmente el pimiento rojo, es fundamental para la absorción del hierro y la síntesis de colágeno, lo que está directamente relacionado con la salud del cabello.
En este sentido, el experto recuerda que “en una persona que padece anemia, los capilares no están suficientemente oxigenados, porque hay una cantidad insuficiente de hierro en la sangre, lo que provoca que los folículos pilosos estén menos sanos y, por tanto, el cabello más débil”. ella explica. Los nutricionistas insisten en que una dieta adecuada es fundamental para un pelo sano, ya que “nutrientes como las proteínas, el colágeno, los minerales y las vitaminas son esenciales para el cuidado del pelo”.
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Carne roja
Es rica en hierro, mineral necesario para el crecimiento fuerte del cabello, ya que interviene en la oxidación y pigmentación del cuero cabelludo. Con muchos estudios científicos que cuestionan el consumo regular de carne roja, puedes apostar a que obtendrás tu hierro de otros alimentos como las almejas, los caracoles, el brócoli o las semillas de calabaza.
Según un estudio publicado en Archives of Internal Medicine, el alto consumo de carne roja se asoció con un mayor riesgo de muerte, especialmente por enfermedades cardiovasculares y cáncer, en comparación con la misma cantidad de carne blanca.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda comer hasta 500 g de carne a la semana, ya que desde 2015 la carne se incluye en la categoría de alimentos «probablemente cancerígenos». España supera con creces este indicador, pues según los datos del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, en 2020 cada español consumirá de media alrededor de 1 kg de carne por persona a la semana.
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Nueces
El cobre, que se encuentra en alimentos como el marisco, las espinacas o los frutos secos, “es un mineral muy importante en la síntesis de la melanina del pelo”, señala González.
Además, las nueces son ricas en ácidos grasos omega-3, «que ayudan a agregar fuerza y grosor al pelo y aumentar la elasticidad, lo que da como resultado un pelo más fino, más grueso, más joven y con menos roturas». Otros alimentos ricos en este ácido graso esencial para el correcto funcionamiento del organismo son el aceite de oliva, las semillas, los frutos secos en general y los pescados grasos.
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Chocolate negro
Es un alimento rico en magnesio, junto con alimentos como los frutos secos, la linaza o la avena, “y es un mineral esencial para activar reacciones enzimáticas importantes para la salud delcabello”, explica González.
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Pipas de calabaza
Son ricas en zinc, un mineral esencial para el crecimiento del cabello y que también se encuentra en carnes y mariscos. Según un estudio publicado en el Indian Journal of Dermatology, Venereology and Leprosy, las personas con bajos niveles de zinc son más propensas a la caída del cabello.
La investigación muestra que otros signos de la falta de este nutriente incluyen la falta de vitalidad, manchas blancas en las uñas, moretones frecuentes y abrasiones en la piel o heridas que tardan en sanar.
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Cereales integrales
González recomienda incluir vitaminas B en tu dieta para prevenir la caída del cabello. “Por un lado, la B8, también conocida como biotina, ayuda a mantener el cabello, la piel y las uñas en buen estado. Su deficiencia está muy relacionada con la caída del cabello”, explica, y recomienda incluir en la dieta alimentos ricos en ellos, como pescado, carne, soja, huevos, legumbres, frutos secos y cereales integrales.
Por otro lado, González también anima a consumir alimentos ricos en vitamina B9 o ácido fólico, “una vitamina que interviene en el transporte de oxígeno en la sangre, por lo que una carencia puede derivar en un cuero cabelludo más débil. Lo podemos encontrar en vegetales de hojas verdes, cítricos, cereales integrales y legumbres”, dijo.
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Espinacas
Al igual que otras verduras de hoja verde como la remolacha, la rúcula o la col, son ricas en arginina, un aminoácido precursor del óxido nítrico que ayuda a dilatar los vasos sanguíneos y mejora así la circulación de oxígeno y nutrientes en el cuero cabelludo. González nos recuerda que los alimentos como las nueces y las semillas también son ricos en arginina.
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Levadura de cerveza
Según la dietista-nutricionista de CreuBlanc, la levadura de cerveza es un alimento estrella en la lucha contra la caída del cabello porque “aporta muchas vitaminas del grupo B, además de una buena cantidad de aminoácidos esenciales y otros minerales como el fósforo”.
Luisa Castillo, nutricionista de Welthy (Luisa Castillo, empresa que elabora menús saludables personalizados a domicilio), afirma que la levadura de cerveza «contiene proteínas de muy alta calidad y contiene aminoácidos esenciales, que son necesarios para mantener la masa muscular y otras funciones metabólicas y el organismo en buen estado.
Entre estos aminoácidos destaca la lisina, que es fundamental para la producción de hormonas, enzimas y anticuerpos, así como para la asimilación del calcio y el buen funcionamiento del sistema inmunitario.
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Agua
Una buena hidratación es esencial para mejorar el flujo sanguíneo. “Cuando nuestro cabello está deshidratado, nos encontramos con que le falta brillo y se siente áspero al tacto, por lo que se seca con facilidad, al igual que la piel. Esto le roba su movimiento natural, haciéndolo inflexible, propenso al encrespamiento, enredos y cutículas abiertas”.
“De esta forma, se dañan las células ciliadas y se daña la protección natural contra la humedad de la piel, lo que provoca la caída del cabello”, explica González, quien recomienda una hidratación estricta y mucha agua tanto para la piel como para el resto del cuerpo. organismo.
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