Con las altas temperaturas es más que lógico que tengamos un sudor mucho más intenso, lo que puede producir lo que se conoce como dermatitis atópica. Esta es una dermatitis que se manifiesta en cualquier parte del cuerpo y es más frecuente en los pliegues donde provoca picazón.
El motivo de ello se debe la irritación. La zona afectada presenta enrojecimiento, escamas o ampollas. Es más; durante el verano es frecuente que la dermatitis atópica mejore gracias a la influencia del sol y de la ausencia de los cambios bruscos de temperatura propios del invierno. Ahora bien, ¿qué tratamiento y prevención hay para esta dermatitis atópica? Lo repasamos.
6En algunos casos puede perdurar

En algunos casos, esta dermatitis puede incluso perdurar una vez que el cuerpo vuelve a la temperatura normal y desaparece el sudor. Estas son ronchas muy pruriginosas (pican mucho) que van precedidas de sensación de calor o quemazón.
Pueden llegar a producirse vesículas. Es más frecuente su aparición en los brazos y el tórax, pero pueden aparecer en cualquier zona del cuerpo. Puede acompañarse de dolor de cabeza, aumento de la salivación, palpitaciones, dolor abdominal y diarrea. Es más frecuente en personas con dermatitis atópica, urticaria crónica, rinitis alérgica o asma.