5 consejos para cortar las uñas del perro

Aprender a cortar las uñas de un perro es una de las muchas precauciones que todo tutor debe tomar con su mascota. Las garras del cachorro cuando se hacen demasiado largas pueden causar muchas molestias e incluso provocar lesiones en el propio perro, así como en los que conviven con él. Por lo tanto, saber cómo cortar las uñas del cachorro y del perro adulto es fundamental por una cuestión de salud y bienestar. Pero cuando el animal tiene la uña más oscura, ¿cuál es la forma correcta de hacerlo? Hemos separado algunos consejos sobre cómo cortar la uña del perro.

1) Cómo cortar las uñas de un perro: todo comienza con la preparación de la mascota

Es importante saber elegir el momento adecuado para cortar la uña del perro. Lo ideal es que esté muy calmado y tranquilo, como después de despertarse de una siesta. Así no ofrecerá mucha resistencia y será más fácil sujetarlo. También es importante hacer una asociación positiva con este momento, con golosinas, caricias o dejando un juguete favorito cerca. Además, antes de aprender a cortar la uña de un perro en casa, es importante montar un kit completo con todo lo necesario: un cortaúñas o alicates específicos para perros, junto con una lija para terminar.

2) Los perros con uñas más oscuras necesitan un cuidado extra al cortarlas

Muchos tutores no saben cómo cortar la uña del perro negro, y prefieren dejar que lo haga un profesional en la tienda de animales. Pero ¿sabías que, a pesar de ser un poco más difícil, no es una misión imposible? Todo lo que necesitas es precaución y atención a la pata del perro. En el caso de los perros con uñas claras, es más fácil localizar la mazorca, es decir, esa parte de la uña más rosada que si se corta puede sangrar y causar muchas molestias al animal. Sin embargo, cuando se trata de un perro con la uña negra, no es posible identificar el cobo, por lo que el tutor debe cortar la uña poco a poco para saber la hora de parada. Normalmente, cuando empieza a aparecer un círculo gris en la región del corte, que es la curvatura de la propia uña, es porque ya está empezando a acercarse a la mazorca.

Cómo Cortarle Las Uñas A Un Perro

3) Cómo cortar las uñas de un perro: observar el crecimiento de las uñas para determinar la frecuencia adecuada

Una cosa que poca gente sabe es que a medida que la uña del perro crece, la mazorca tiende a crecer junto con ella. Por lo tanto, es esencial mantener una regularidad para recortar las garras de su mascota, ya sean blancas o negras. Para saber cuándo y cómo cortar la uña negra del perro, un buen consejo es observar su crecimiento sin dejar que se alargue demasiado. El crecimiento puede variar según la raza y los hábitos del animal, pero en general, se recomienda cortar las uñas del perro cada 15 días o al menos una vez al mes.

4) Crear el hábito de cortar las uñas de la mascota es fundamental para que se acostumbre

No basta con aprender a recortar la uña del perro en casa, sino establecer una cierta frecuencia para que esto se convierta en un hábito en la rutina del animal. Los perros tienden a ser muy agitados, pero si le enseñas desde el principio a comportarse a tiempo para recortar las garras, todo será mucho más tranquilo. Para facilitar aún más este proceso, nuestro consejo es intentar que el perro se acostumbre a cortar las uñas cuando aún es un cachorro. Usar y abusar de las golosinas para premiarlo por el buen comportamiento (esto también es válido para perros adultos que aún no están acostumbrados).

5) La paciencia y la calma son importantes para aprender a cortar la uña del perro negro

Es importante hacer siempre todo con mucha paciencia y cariño para que el cachorro relacione este momento con cosas buenas. El nerviosismo es un gran mal que puede entorpecer a la hora de cortar la uña del perro, ya que se puede acabar cortando la uña más de lo debido y el animal acabará sintiendo dolor. Si llegas a la mazorca y empiezas a sangrar, también es importante no desesperar. Para intentar aliviar las molestias de la mascota, hay que aplicar presión en la zona con un algodón y un poco de polvo hemostático o almidón de maíz. Esto ayuda a detener la hemorragia. En caso de que la herida haya sido más grave, no dejes de consultar a un médico veterinario.