Nos costará muchísimo despedir a Marcelo Vieira del Real Madrid. El club de la capital de España se ha convertido en la casa del defensor brasilero, quien lleva una larga carrera en el fútbol y estaría por cerrar su etapa como jugador blanco que le ha dado momentos difíciles de olvidar para él y toda su afición. Los finales también son felices, así que el nativo de Río de Janeiro se prepara para ese justo desenlace por el Santiago Bernabéu, su mayor tesoro en este deporte que lo ha visto crecer.
4Jugar lo pone contento y más con un club que lleva en su corazón
El domingo pasado, Carlo Ancelotti sustituyó a Marcelo casi al final del partido y salió entre lágrimas del cotejo para que su compañero Nacho entrase al campo. Hay muchos sentimientos encontrados, que desde luego tienen al jugador un poco afligido por lo que se viene.
Aunque en sí, está contento de que está dando lo mejor por el Real Madrid. Cada juego para él es mágico, porque todos le hacen sentir especial y ha sentido que de verdad está en familia. Al final, es lo que mayor valor le da, más allá de conseguir triunfos. Pues le llena el amor de las gradas, del técnico, sus compañeros y familiares.
