El servicio eléctrico suele tener costes elevados en muchos países, y España no está exenta de ello. Los constantes aumentos que no siempre justifican la calidad del suministro provoca que muchas personas decidan cambiar de proveedor. En tal sentido, la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha desvelado cuál es la tarifa más amigable con el bolsillo de los ciudadanos. El estudio en cuestión toma en cuenta la participación de 20.000 personas y evalúa a las cinco corporaciones principales en la prestación del servicio.
Cabe destacar que un mayor consumo se traduce en una mayor cantidad de emisiones de carbono y demás gases de efecto invernadero (GEI). Diversas organizaciones públicas y privadas han impulsado medidas para contrarrestar estos efectos mediante la reducción de la huella de carbono. De hecho, este objetivo forma parte de las metas trazadas por la Unión Europea y la Organización de las Naciones Unidas. Europa es uno de los continentes que más esfuerzo ha realizado para lograr revertir los efectos dañinos mediante un proceso de transición energética hacia la adopción de energías renovables, más favorables para el planeta.
7Sin compromisos a largo plazo
En muchas ocasiones, el bajo coste de un servicio está supeditado a la firma de un contrato por un período establecido. No obstante, no sería este el caso de la tarifa ideal estipulada por la OCU. De manera que si algún usuario desea darse de baja, puede hacerlo de manera expedita y sin esperar a que expire el contrato que ha firmado con la compañía, con la posibilidad de retornar en cualquier momento.
