Natillas de chocolate blanco: el pecado que solo debes comer una vez al año

Cuando de postres se trata, las natillas encabezan la lista de los preferidos durante generaciones. Todos hemos crecido degustando este postre tradicional y sencillo preparado por las manos de nuestras abnegadas abuelas y madres. Este dulce cremoso y delicioso cierra cualquier comida con broche de oro, y también se presenta como la mejor merienda para los niños. Hacerla con chocolate blanco le otorga un sabor irresistible, pero su contenido calórico la convierte en un pecado que debes limitarte a cometer.

Te invito a conocer todo sobre esta versión calórica, pero deliciosa, que te puedes permitir al menos una vez al año.

Las natillas: postres con sabor a tradición

Cómo no recordar esas tardes en que la brisa rozaba el rostro y en las que tu abuela o tu madre te llamaban después de jugar para qué merendarás con una dulce y cremosa natilla; este postre de larga data se ha convertido en una gran tradición, y su receta pasa de generación en generación, mientras en cada hogar le ponen su propia firma y sabor.

Preparadas inicialmente con vainilla, huevos, maicena, leche y azúcar, las natillas han ido evolucionando hasta convertirse en la estrella servida preparada con coco, fresas e incluso chocolate negro. En cada hogar se mantiene la llama de este postre tradicional que rivaliza con la crema maragata y que cuyo sabor es simplemente espectacular. 

Natillas De Chocolate Blanco: El Pecado Que Solo Debes Comer Una Vez Al Año
Foto: Pixabay