Miguel Ángel Pulpillo no la tenido fácil en su vida. Es de esos rostros que recordamos por haber participado en Gran Hermano donde tuvo la oportunidad de integrar las filas del prestigioso programa. Lo vimos por primera vez en las pantallas en el año 2006 cuando se hizo notar en el plató. Sin embargo, el oriundo de Alemania, con padre andaluz y madre gallega, ha visto de qué forma el destino se le ha ido en contra para seguir creciendo a través de su trabajo.
Estuvo en el ojo del huracán cuando ya hace cinco años. Apenas iniciaba su carrera en el espectáculo español, y se vio seriamente afectado ante un arresto por parte de las autoridades en la que fue definida para ese entonces como la operación Krake.
Luego de esto, las cosas no fueron igual. Todavía Pulpillo está sufriendo las consecuencias. Ya te diremos las razones por la que hoy en día vive una pesadilla para encontrar trabajo, y hasta con su salud, porque necesita una máquina para respirar.
6Necesita una máquina para respirar
Las consecuencias de haber pasado por este evento llevaron a Pulpillo a sufrir de ansiedad. De hecho, aumentó 20 kilos peso y para completar necesita una máquina para poder respirar en las noches. A pesar de que la sentencia lo ha dejado libre de toda culpabilidad legal, su moral vale decir que está por los suelos. La gente suele señalarlo de “Pulpi, el estafador”.
No obstante, no pierde la esperanza de ver esa luz al final del túnel para hacer borrón y cuenta nueva en esta dura situación que le ha tocado vivir. No dudó en enviarle agradecimiento a su abogado, el profesional Víctor Tovar. Este se encargó de apoyarlo en ese desafío que ahora deberá sobreponerse y continuar con el peso de la difamación que se tiene hoy en día su nombre.
