domingo, 5 mayo 2024 7:12

El de Di María no es el único: futbolistas que han sufrido robos en sus casas

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Escuchar de robos o asaltos en la actualidad es un tema que sorprende mucho; por eso muchos se conmocionaron cuando Ángel Di Maria tuvo que ir corriendo a su casa, sin siquiera terminar un partido, debido a que fue víctima de un robo. Este tipo de crímenes en contra de los futbolistas ha sido una tendencia constante en los últimos años, al punto de que estos se han multiplicado y han crecido en contraste a lo que se podía apreciar en otras épocas. La fama y la creciente exposición de lo que tienen ha hecho se conviertan en blancos muy apetecibles de unos criminales que no respetan nada.

Países como Inglaterra España y Francia han visto como estos crímenes suben, pero la verdad perturba es la asiduidad con la que se están perpetrando y lo poco que parece que se hace para evitarlo. Las ganancias de los jugadores es algo que todos conocen, por eso se podría presumir que gozan de una protección superior; aunque nada más alejado de la realidad y el reciente robo a la casa del argentino lo demuestra. No obstante, el mediocampista del PSG no es la primera víctima ni tampoco será la última de algo que ya ha sucedido muchas veces a otros futbolistas, aunque en unos casos sorprende por lo sucedido.

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Jordi Alba también fue víctima del hampa

Jordi Alba
El lateral fue robado mientras estaba fuera del país

Uno de los jugadores del momento del FC Barcelona para Ronald Koeman, también fue víctima del hampa como Di María; ese futbolista no es otro que Jordi Alba. Hace unos años, mientras el conjunto blaugrana se encontraba concentrado en Milán para uno de los partidos de Champions League, el lateral izquierdo fue despojado de algunas pertenencias valiosas que fueron sustraídas de su caja fuerte.

Si bien nunca trascendió a ciencia cierta que fue lo que se llevaron de la casa del defensor del Barcelona; la realidad es que, según fuentes policiales, el robo se efectuó en una de las cajas fuertes que tiene el jugador. Además, todo sucedió con los padres de Alba también presentes en la casa mientras la robaban; por suerte nunca se encontraron con los criminales y no hubo víctimas que lamentar.