La leche, uno de los alimentos más importantes en nuestra dieta, es también uno de los más controvertidos últimamente. Después de tantos estudios alimenticios uno ya no sabe si es mejor la leche entera, la semidesnatada o si hay dejar de tomarla, pues muchos se contradicen. Además, con la proliferación de las intolerancias, se ha comprobado que no a todo el mundo le sienta bien. Pero si eres de los apasionados de este producto y no te hace mal, te vamos a dar unos consejos para que puedas perder unos kilos con una dieta muy fácil de llevar.
Sí que es cierto que este régimen puede resultar algo monótono, lo que puede poner a prueba nuestra capacidad de aguante. Pero si te ves con fuerza para agarrarte al vaso de leche y hacer el esfuerzo, perderás peso muy rápidamente. Además, este alimento te dará una serie de nutrientes y complementos que mantendrán tu organismo en buen estado durante el tiempo que dura la dieta.
3¿POR QUÉ SOLO LECHE?
Es, lógicamente, la primera pregunta que se te viene a la mente. Entendemos que puede ser algo cansino tomar solo un alimento, pero no es durante todo el régimen. Aunque la dieta láctea dura siete días, solo los dos primeros días no se puede tomar nada más que leche. La cantidad no es limitada y dependerá de la sensación de hambre que tenga cada uno. El mínimo recomendado es de un litro y medio y el máximo de tres litros diarios.
Todo esto tiene una explicación: bebiendo tres litros consumirás cerca de 2.000 calorías, un aporte con el que en condiciones normales no adelgazarías. Pero como la mayoría de las calorías que provienen de la leche se concentran en grasa, el cuerpo al no recibir alimento sólido no puede digerirlas, y por tanto lo que se logra es “quemar” las grasas almacenadas en la barriga y en la cintura y así adelgazar. Sucede igual que con otras dietas ricas en líquidos, como la del pepino.
