Dormir, como muchos sabemos nos aporta grandes beneficios y a su vez es imprescindible. En el momento que nos vamos a la cama, la mente es la encargada de ocuparse de los sueños mientras que el cuerpo se apaga. Nuestro organismo se encuentra trabajando hasta en la etapa más profunda del sueño.
En el transcurso de la noche y según explica la Fundación Nacional del Sueño: «nuestro cerebro recibe un gran impulso energético y se activa, cae nuestra presión arterial, la respiración se ralentiza, las hormonas del crecimiento son liberadas y los músculos se relajan».
[nextpage]Hormonas del hambre y cuerpo reparador
En la medida que nos vamos durmiendo, nuestro sistema digestivo hace que las hormonas conocidas con el nombre de ghrelina y leptina se activen. Esta última inhibe el hambre, mientras que la otra hormona lo estimula. Al no dormir lo suficiente, el equilibrio de estas dos hormonas podrían llegar a alterarse. Lo anterior explica por qué las personas que padecen de insomnio ven afectado el apetito.
Al dormir, el cuerpo libera la hormona del crecimiento llamada somatotropina. Esta se encarga de crecer y reparar huesos y músculos. La misma funciona mejor en el transcurso del sueño porque es cuando nuestros músculos se encuentran más relajados.
[/nextpage][nextpage]Movimientos en los ojos y defensas al cien por cien
Por si no lo sabías, estos movimientos oculares se les conoce como una de las características más comunes a la hora de dormir. Es el resultado de la limpieza que efectúan los párpados. Las legañas que son acumuladas en las esquinas de nuestros ojos, son los residuos como el polvo o bacterias que los párpados van recogiendo.
Por otra parte, explica el Instituto Nacional del Cáncer lo siguiente: «Nuestro sistema inmunológico amplía su defensa mientras dormimos, al ampliarla combate infecciones y libera una proteína llamada factor de necrosis tumoral que podría eliminar células cancerígenas».
[/nextpage][nextpage]Dormir mejora la piel, no estrés
Así como se reparan los músculos mientras estamos durmiendo, la piel por su parte, trabaja en su propia restauración. En la etapa del sueño se van generando más células de piel y esta misma desacelera su descomposición.Un sueño completo junto con un buen descanso pueden hacer posible que obtengamos muchos beneficios.
Por otra parte, la relajación que experimentamos al dormir es debido a la disminución de los niveles de cortisol. Una hormona esteroide que se relaciona con el estrés. «Cuando los niveles son altos es porque pasamos por una etapa de ansiedad o depresión», según explica la Red de Salud de la Hormona.
Inesperados saltos, sacudidas y tirones
Seguro en algún momento, acabas de conciliar nuevamente el sueño pero de forma repentina das como una especie de un salto o sientes que te caes por un vacío. Esto pasa de manera frecuente en muchas personas, no es nada peligroso.
Se trata de un extraño fenómeno que ocurre solo en el momento en la cual estamos dormidos. Esto se debe a la preparación de nuestro cuerpo respecto a los cambios que puede experimentar durante el sueño. Aquí las funciones se hacen más lentas y en ciertas ocasiones, nuestro cerebro interpreta ese cambio como si se tratara de una caída, por ello la reacción.
Ahora bien, si eres una de las personas que les encanta dormir abrazados con su pareja, entonces lo mejor sería dormir algo separados. Correrías el riesgo de asustarlo y despertarlo con estas sacudidas inesperadas.
Músculos paralizados y sueños subidos de tono: otras de las cosas que te ocurren al dormir
Así como lo estas leyendo, los músculos pueden llegar a paralizarse de forma temporal. Pero ojo, no te preocupes, no hay por qué asustarse. Esto llega a ocurrir porque al dormir estos necesitan desconectarse del cerebro para prevenir que mientras estamos soñando no podamos movernos de una forma incontrolable.
Por otro lado, también tenemos los sueños subidos de tono. Así como ocurre en los hombres también les pasa a las mujeres. Cuando dormimos muchos hemos pasado por momentos de excitación sexual. Es debido a la segregación de unas determinadas hormonas que nos inducen para llegar a ese estado.
[/nextpage][nextpage]Apnea
El parar de respirar cuando se está durmiendo es provocado por un trastorno que se conoce como síndrome de la apnea obstructiva del sueño, (AOS). Esto no es para nada algo nuevo. Cada vez se hace más frecuente que la gente lo trate en las clínicas del sueño. Y pues, como la obesidad es un factor de este trastorno, los expertos en la materia creen que los casos muy posiblemente aumenten.
Generalmente viene acompañada de un ronquido. Este trastorno ocurre cuando los músculos de nuestra garganta llegan a colapsar y entonces bloquean las vías respiratorias. Como resultado, hacen que la persona pare de respirar.
Asimismo, los períodos de tiempo que pueden llegar a durar hasta unos 26 segundos. Ocurren hasta unas 50 a 80 veces en una sola hora durante la noche, afirma Idzikowski.
[/nextpage][nextpage]Al dormir pudieras experimentar el síndrome de la cabeza explosiva
Hay momentos en las cuales uno queda dormido de forma plácida y de repente parece como si una bomba explotara en nuestra cabeza. Se trata del síndrome de la cabeza explosiva.
Es una variación de la parasomnia. Se le describe como la explosión de una bomba, un disparo o un rayo. Este no causa dolor, pero lo que sí llega a causar es angustia.
Existen expertos que manifiestan que esto es muy extraño. Sin embargo, Anderson indica que ha recibido casos. Además explica que: «Es el equivalente sensorial del arranque de un motor que todos sentimos cuando vamos a dormir».
[/nextpage][nextpage]Comer
Comer algun tipo de bocadillo mientras uno está dormido no es un gran problema en realidad. Sin embargo, en los casos más extremos se le clasifica como el síndrome de alimentación nocturna. Te sorprenderá saberlo, pero aquí los sonámbulos cuando despiertan se enfrentan con envoltorios de alimentos vacíos y hasta sus cocinas desordenadas.
Ellos pueden visitar la cocina diferentes veces en una sola noche y al despertar no recuerdan prácticamente nada. Además de perder su sueño, pueden subir de peso lo que causa problemas físicos y mentales.
Asimismo, como pasa con otros comportamientos extraños, el comer dormido suele pasar cuando las personas experimentan parasomnias.
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