La especialización ecológica, el factor más relevante para el éxito evolutivo de las ardillas ante el cambio climático

El grado de especialización ecológica(capacidad de habitar muchos o pocos ambientes)es el factor más relevante para el éxito evolutivo de las ardillas ante el cambio climático, según ha revelado una investigación liderada por la Universidad Complutense de Madrid(UCM) y el Instituto de Geociencias (UCM-CSIC).

La investigadora del Departamento de Geodinámica, Estratigrafía y Paleontología de la UCM, Iris Menéndez, ha asegurado que las especies más restringidas climáticamente tienen más posibilidades de extinguirse por la destrucción de su hábitat pero por la misma razón tienen más posibilidades de generar nuevas especies.

«Al fragmentarse su hábitat debido a los cambios climáticos, sus poblaciones se dividen y, si logran sobrevivir suficiente tiempo, el aislamiento continuado favorece la especiación», ha explicado Menéndez.

Sin embargo, las especies que son capaces de habitar en climas muy distintos tienen menos dependencia de su entorno y los cambios climáticos les afectan menos. «Esas especies son más longevas por eso y pueden perdurar durante millones de años sin cambios sustanciales», ha añadido la investigadora.

También en este estudio, en el que participa la Universidad de Alcalá de Henares, se ha comprobado que las especies presentes en zonas montañosas también tienen más probabilidad de generar especies nuevas.

El área con mayor número de especies de ardillas es la región Indomalaya, con 117 especies distintas. Sin embargo, los análisis muestran que las ardillas terrestres norteamericanas son las que más especies han generado en un periodo más corto de tiempo.

«Allí encontramos todas las ardillas listadas, perritos de las praderas y marmotas, que se extendieron por Norteamérica ocupando sus praderas. Podemos explicar esto ya que ser terrestres les permitió explotar recursos nuevos y adaptarse a estas nuevas situaciones», ha recalcado la investigadora.

Por último, el estudio revela que para este grupo de pequeños mamíferos, si el cambio climático se combina con otros factores, como la deforestación, las consecuencias pueden ser mucho más graves y suponer la pérdida de gran parte de la diversidad de la familia de las ardillas.