Tenemos la concepción de que el hombre es el animal más poderoso de la tierra. Sin embargo, hay agentes más poderosos todavía. De hecho, la naturaleza es mucho más fuerte. La Naturaleza tiene tanto poder que puede regenerarse a pesar de las barrabasadas que ha hecho el ser humano sobre ella. Tras un incendio, ella misma se puede regenerar. Puede absorber elementos del hombre y seguir su curso.
El hombre puede construir, pero hasta el punto que le deje la madre naturaleza. De hecho, los propios elementos naturales pueden destruir una ciudad en minutos con un terremoto o arrasar construcciones con una fuerte riada. El viento puede levantar granjas. Incluso los árboles pueden absorber elementos metálicos que les obstruyen su crecimiento. Vamos a ver cómo la naturaleza, si se lo propone, es imparable, a pesar del hombre.
5Naturaleza rompiendo rocas

Pero no solo el metal es objeto de deseo de los árboles más expansionistas. También la roca ha sido la víctima de esta planta. Los árboles siempre buscan la humedad bajo la tierra. Y esto lo hacen con unas potentes raíces.
Si las raíces se encuentran con un bloqueo, como ya hemos visto en la superficie, bajo tierra sucede los mismo. Lo rompen. Este árbol tiene la fuerza suficiente para partir una roca y colonizarla con su corteza. Parece asombroso que la madera quiebre a la piedra.