Artur Carvalho, el obstetra que el pasado siete de octubre trajo al mundo a Rodrigo, un bebé que nació sin rostro en Portugal, contaba a sus espaldas con cinco procesos abiertos por negligencia médica, tal y como informamos desde este medio.
Entre estas negligencias, que han ido saliendo a la luz a raíz de la polémica generada en el país luso, se incluyen nacimientos de niñas con dos vaginas, dos rectos y las piernas invertidas.
Una denuncia de la madre del pequeño, ha llevado a la Fiscalía ha abrir una investigación ante la pasividad de las autoridades sanitarias. El Colegio de Médicos ha decidido apartar durante seis meses a Carvalho de sus funciones.
Los medios portugueses han hecho público el caso de Luana, una niña de ocho años que nació sin barbilla y con las piernas invertidas, que podría ser su primer caso de negligencia. También el de Diana, que nació en 2016 con dos rectos y dos vaginas.
«Tenía todo como si fuesen dos niñas. Tenía dos rectos y dos vaginas que funcionaban», declaró la madre al «Correio da Manhã».
Carvalho realizó dos ecografías a la madre de la pequeña, y hasta cinco a la madre de Rodrigo, en ambos casos, el obstetra aseguró que los embarazos iban bien. Sin embargo, además de las piernas invertidas y sin barbilla, Diana tenía los dedos de los pies «pegados» y graves lesiones cerebrales.
Tres días después del nacimiento, llevaron a la madre a ver a la niña a la incubadora, que estaba ligeramente tapada. Antes de descubrirla, pidieron a los padres de los demás niños que abandonaran la sala.
«¿Estás preparada?», cuenta que le preguntó el padre de la pequeña. Al verla finalmente, asegura que la conmoción fue enorme: «No quería creer que era mi hija».
Además de los cinco procesos abiertos, algunos medios aseguran que Carvalho llegó a estar bajo investigación por otros 10 casos más, cuatro de los cuales fueron archivados, entre ellos el de Luana, denunciado en 2011.
