Desde el regreso a la actividad laboral y lectiva el pasado mes de septiembre, el transporte madrileño ha colapsado. Los ciudadanos de la capital sienten que tanto Renfe Cercanías como Metro de Madrid no están respondiendo adecuadamente a la cantidad de afluencia de viajeros que cada día utiliza los servicios del transporte público, perjudicándoles en su día a día con aglomeraciones, retrasos e incidencias constantes.
Si bien la mayoría de las críticas se han centrado durante los últimos meses en los trenes de Cercanías, desde mediados de septiembre el Metro de Madrid está sufriendo fuertes aglomeraciones y demostrando insuficiencia para ofrecer un servicio óptimo en las horas punta de la mañana. Las obras y el cierre parcial de la Línea 6 —la más utilizada de España— han complicado el panorama
La situación ha escalado hasta tal punto que han tenido que llegar a cortar puntualmente el acceso a los andenes y desplegar a 120 operarios para gestionar las grandes cantidades de personas en los mismos; lo que algunos llaman "empujadores", aunque Metro de Madrid le confirmó al diario Qué! que tienen prohibido tocar a los usuarios, solo deben indicar y facilitar el tránsito.
Los responsables de Renfe Cercanías y Metro de Madrid se echan las culpas
Metro de Madrid ha lanzado una licitación por valor de 107.925,71 euros para el refuerzo de materiales de cara a regular el flujo de viajeros ante el incremento de pasajeros que está registrando el servicio. Se prevén unos incrementos en el flujo de viajeros de un 8 % en el suburbano madrileño y existe la previsión de cerrar el año con nuevos récords, pero el gran problema es que nos encontramos en la recta final de octubre y las medidas tomadas hasta ahora no han provocado un gran cambio en el funcionamiento general del transporte de la ciudad.

Y, con todo ello sucediendo, buena parte de los ciudadanos están realmente indignados con el comportamiento de los responsables políticos respecto a la delicada situación del transporte madrileño. Es habitual observar cómo, desde hace semanas e incluso meses, los unos se echan las culpas a los otros mientras no se observan soluciones reales en el día a día de los afectados.
El presidente de Renfe, Álvaro Fernández Heredia, utiliza su perfil en redes sociales para, de vez en cuando, defender el funcionamiento de la operadora ferroviaria, pero últimamente ya ha acusado directamente a los portavoces de Metro de Madrid de engañar respecto al servicio de Cercanías.
"Atención, bulo. Esta información que propaga el responsable de metro es FALSA. La C5 lleva reforzada desde enero. Es triste (e inaudito) tener que estar desmintiendo a un responsable de otro operador de transporte público", escribía en una publicación de X en respuesta a Ignacio Vázquez Casavilla, consejero delegado del Metro de Madrid.
El mensaje de este hablaba de un recorte de trenes en la C5 de Cercanías mientras se llevan a cabo obras en la zona, e incluía hasta un emoji vomitando. Y es que el consejero delegado del Metro de Madrid y Óscar Puente son los más activos en esta batalla: llevan días peleándose por X, intercambiando mensajes constantes y entonando el "y tú más".
En los últimos días, la discusión se ha vuelto furibunda: Óscar Puente lleva semanas recogiendo las quejas en redes sobre el funcionamiento del Metro y, como respuesta, Ignacio Vázquez ha empezado a señalar las aglomeraciones y retrasos en Cercanías.
"Lo que sucede en el Metro de Madrid no te lo cuentan. A cambio le prestan sus páginas a quien lo dirige para que me ataque a mí y no de explicaciones. Lo llaman periodismo y no lo es", decía Puente citando una entrevista del consejero delegado en el diario El Mundo. "Vergonzoso cómo intentan manipular la realidad y se olvidan de denunciar el principal problema del transporte público madrileño: Cercanías", replicaba Vázquez.
Óscar Puente y el consejero delegado de Metro de Madrid llevan días entonando el "y tú más" por redes mientras no se observan soluciones reales en el transporte madrileño
"Metro de Madrid ha decidido, ante el caos que se vive desde hace ya dos meses, que la megafonía recuperará a la gran Lola Flores el día de la boda de Lolita. 'Si me queréis, irse'", ironizaba Puente reflejando un vídeo que comparaba a los madrileños con animales hacinados por lo apretados que van en los vagones. "El ministro tapando sus vergüenzas", comentaba Vázquez subiendo dos imágenes de la estación de Atocha.
Y así, hasta la infinidad. Del "ya mienten hasta en las incidencias" del ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, a las acusaciones de Vázquez no solo llamando manipulador a Puente, sino también al secretario general del PSOE de Madrid, Óscar López, o a la portavoz de Más Madrid Manuela Bergerot, a cuyos mensajes reaccionaba espetando un "¡menudo nivelito!" poniendo entre comillas que sea defensora de todos los madrileños.
La tensión continúa en ascenso mientras los madrileños se preguntan cuándo van a parar de culparse entre el Gobierno central y el autonómico para empezar a colaborar de cara a aplicar soluciones reales que terminen con el caos del transporte en el que lleva inmerso Madrid desde el mes de septiembre.







