En los despachos del Santiago Bernabéu, empieza a instalarse una sensación de resignación. El fichaje de Álvaro Carreras se complica más de lo previsto. Aunque el lateral ha manifestado su deseo de vestir la camiseta blanca, las negociaciones con el Benfica no avanzan. El club portugués no se mueve de su postura y exige los 50 millones de euros de la cláusula de rescisión, una cantidad que Florentino Pérez no está dispuesto a pagar.
Mientras tanto, Álvaro Carreras permanece en silencio. Espera una resolución que no llega, mientras observa desde la distancia cómo el reloj avanza sin novedades. La directiva blanca ha intentado cerrar la operación durante semanas, consciente de la necesidad urgente de reforzar el costado izquierdo de la defensa, pero los obstáculos económicos han sido constantes.

La falta de avances concretos ha obligado a la cúpula madridista a reactivar una vía alternativa que ya se había contemplado anteriormente. Se trata de un viejo conocido del fútbol español que ahora brilla en Alemania, Alejandro Grimaldo.
Grimaldo toma fuerza como opción viable tras el no a Álvaro Carreras
En este contexto, el nombre de Alejandro Grimaldo gana fuerza dentro de las oficinas del club. Con 29 años y un presente inmejorable en el Bayer Leverkusen, el lateral izquierdo está viviendo uno de los mejores momentos de su carrera. A las órdenes de Xabi Alonso, ha elevado su rendimiento y se ha consolidado como pieza clave en el esquema del campeón alemán.
El reencuentro con Xabi, ahora técnico del Real Madrid, sería un factor decisivo en su posible llegada al conjunto merengue. Además, a diferencia del caso Álvaro Carreras, la operación por Grimaldo sería mucho más accesible. Su salida de Leverkusen rondaría entre los 15 y 18 millones de euros, cifras considerablemente más manejables para las arcas blancas.
A esto se suma la buena predisposición del jugador, que no vería con malos ojos volver a LaLiga y defender los colores de un club como el Real Madrid. Aunque también tiene propuestas de equipos ingleses, ninguna representa un desafío tan seductor como el de regresar a España por la puerta grande. Dentro del club blanco, su nombre está sobre la mesa y las conversaciones han tomado un nuevo impulso.
El presente de Álvaro Carreras no ayuda a su causa
Mientras tanto, Álvaro Carreras trata de demostrar su valía en el terreno de juego. Está disputando el Mundial de Clubes con el Benfica, una vitrina de lujo para dejar buenas sensaciones. Sin embargo, su debut ante Boca Juniors no fue el esperado. Su rendimiento estuvo lejos de brillar y dejó dudas en una actuación bastante discreta.
Ahora se le viene encima otro desafío, el cruce ante Auckland City. A priori, se trata de un encuentro en el que Benfica parte como claro favorito, pero para Carreras se convierte en una prueba crucial. Necesita reivindicarse, mostrar su mejor versión y convencer no solo a su club, sino también al Real Madrid, que sigue observando cada uno de sus movimientos con atención.
El problema es que el tiempo no juega a su favor. Mientras Grimaldo se consolida como una opción más firme y asequible, Álvaro Carreras ve cómo el tren del Madrid puede pasar de largo. Las dudas en torno a su rendimiento y las exigencias económicas del Benfica lo alejan cada vez más del Bernabéu. Por ahora, el escenario no pinta favorable para el joven lateral gallego.