El fantasma de Filomena no deja dormir al Ayuntamiento de Madrid

A inicios de 2021 tuvimos con nosotros a Filomena. Entonces, vivimos uno de los temporales más recordados de los últimos tiempos en España, sino el que más. Fue la gran nevada, para muchos la mayor del siglo, cuando incluso la capital madrileña recibió espesores de 30 centímetros, temperaturas bajo cero y nevando unas 30 horas.

Esto es lo que tuvimos con la borrasca de gran impacto Filomena que nos afectó hace dos años, y de la que cada vez que hace un poco de frío o hay previsiones de nieve empezamos a asustarnos por si podría volver a repetirse.

Un susto del que en el Ayuntamiento de Madrid no se recuperan… y del que ha sido el propio alcalde, Jose Luis Martínez-Almeida, quien ha reconocido que están «agobiados» por si el fenómeno vuelve a repetirse.

Madrid está más que atento por si el fenómeno de Filomena se repite

Porque sí; Filomena pasó por España hacia varios puntos repartidos de la geografía española, si bien destacó frente al resto por la gran nevada que propició, tanto en extensión como en espesor, en el interior peninsular entre los días 8 y 9 de enero de 2021.

Es más; y según las diversas estimaciones, las acumulaciones de nieve oscilaron entre los 30 y 50 centímetros, dándose los máximos en Madrid capital y alrededores, algo totalmente inusual.

En esas, lo cierto es que la gran capa de nieve que se encontraba en el suelo junto con un anticiclón centrado durante la siguiente semana provocó una ola de frío en la que se batieron récords con temperaturas mínimas, con gran acento en la región madrileña… y con serios apuros para el mismo Ayuntamiento de Madrid.

Es por esto que han sido muchos los que se han preocupado del fenómeno, atendiendo a si, con las bajas temperaturas que se aproximan para estos mediados y finales de enero, volveremos a vivir una nevada histórica como la que fue la de Filomena.

Almeida cree que Madrid está mejor preparada ahora

Porque la ausencia de nieve durante estas Navidades y unos primeros días de 2023 entrando ahora con el frío en su horizonte, hacen que sea muy improbable que se produzca otra nevada de estas características…

Aunque el portal de eltiempo.es ha concluido que es «completamente imposible predecir si va haber otra Filomena». Sobre todo en un año concreto o con meses de antelación. Esto es a lo que se ha agarrado el alcalde de Madrid, quien ha manifestado que la ciudad está mejorar preparada ahora que entonces para hacerle frente de nuevo.

«Hemos multiplicado el parque de máquinas quitanieves de la ciudad y el parque de máquinas de carácter menor, y los contratos de limpieza hemos incluido prácticas para actuar con más rapidez, al tiempo que hemos establecido depósitos de sal y salmuera», ha dicho.

Almeida Filomena Madrid 2023

«Estamos mejor preparados para acometer una nevada histórica de esas características que se produce una vez cada 150 años«, ha trasladado ante los periodistas, desde los Jardines de Cecilio Rodríguez del Retiro, tras presentar los resultados de la estrategia Madrid 360. Es ahí donde ha recordado los «hechos histórico y días inolvidables» que siguieron a esta tormenta de nieve, que ha vuelto a calificar como «un tsunami seguido de ocho noches de heladas históricas en 50 años».

Las nuevas borrascas que se acercan no serán un nuevo Filomena, pero habrá nevadas en la sierra

De todas formas, un inciso. Y es que, aunque es bastante improbable que vuelva a suceder un Filomena en Madrid o en el resto de España, a nuestro país se le acerca la borrasca Gérard, como se le ha llamado, y que, tal y como informan los servicios metereológicos, el país tiene activadas 40 alertas desde este lunes.

Estas se corresponden a fuertes vientos, oleajes, lluvias y nieve en zonas montañosas. Por ejemplo, en Navarra y Huesca se espera que las mayores nevadas de los últimos días se produzcan por culpa de la borrasca.

En lo que concierne a Madrid, precisamente, Almeida puede estar tranquilo, pues solo se registrarán brumas y nieblas en zonas altas de la sierra y puntos del tercio sur, junto a heladas débiles dispersas, que serán más frecuentes en la sierra y más intensas en las cumbres.