El aire acondicionado se ha convertido en un imprescindible con España pasando su primera y temprana ola de calor. Pero el precio de la luz hace que muchas personas no puedan permitirse ponerlo tanto como desearían. La ciencia ha venido en su auxilio explicándonos un truco que hará que podamos disfrutar de un hogar más fresco por menos dinero. Estamos seguros de que es un tema que realmente te interesa.[nextpage]
El aire acondicionado nos ayuda a bajar la temperatura
Y es que, aún con el tope del precio del gas, el de la luz sigue en buena medida disparado. Pero cuando el calor arrecia, el mejor aliado es el aire acondicionado. El problema no es solo que durante el día el calor se dispara, sino que por las noches no refresca lo suficiente para permitir que conciliemos el sueño.
Gracias al aire acondicionado conseguimos rebajar varios grados la temperatura de la estancia donde está colocado. Sin embargo también hay otras medidas que pueden ayudarnos a paliar el calor.
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Otras medidas que pueden ayudar a reducir la sensación de calor
Entre ellas está el uso de ventiladores. Son una de las opciones más saludables, ya que mueven el aire rebajando la sensación de calor, en el mercado hay una amplia gama de ellos, desde los tradicionales a los de techo pasando por los que tienen forma de torre. Incluso los hay de bajo consumo, lo que es otro punto a su favor.
Por otro lado, una manera de evitar que las habitaciones se recalienten es minimizar su exposición al sol, para ello lo mejor es mantener las persianas bajadas y las ventanas cerradas. [/nextpage][nextpage]
Mantenerse hidratado es fundamental cuando el calor arrecia
Además, para evitar los golpes de calor, debemos intentar no salir de casa en las horas centrales del día en la medida de lo posible. Es importante que no olvidemos hidratarnos bien y que evitemos las bebidas alcohólicas, pues estas deshidratan. También es mejor consumir comidas ligeras que copiosas para ayudar a que nuestro cuerpo esté más hidratado.
Las toallas húmedas y los pulverizadores de agua también se pueden convertir en unos excelentes aliados a la hora de ayudarnos a bajar nuestra temperatura corporal. [/nextpage][nextpage]
El truco descubierto por investigadores de la Universidad de Sidney
Pero vamos con la explicación del truco que os comentábamos al principio. Se trata de conseguir mantenerse fresco gracias al uso del aire acondicionado y sin que se dispare el precio de la factura de la luz. Se basa en un estudio realizado por un grupo de investigadores de la Universidad de Sidney en Australia. Este truco puede ayudarnos a que la temperatura de nuestra casa no suba de 25 grados, lo que en vista de las temperaturas que hemos estado alcanzando en algunas partes de España no está nada mal.[/nextpage][nextpage]
Colocar el aire acondicionado y el ventilador en puntos estratégicos
Se trata de colocar el aire acondicionado junto a un ventilador en lugares estratégicos de la casa. Los expertos afirman que, si lo haces bien, puedes conseguir ahorrar entre un 70 y un 75% de la factura a final de mes.
Y es que el aire acondicionado es un aparato muy efectivo para ayudarnos a reducir la temperatura, aunque en la calle la temperatura suba a 40 grados, gracias a él en casa puedes estar a 25. Eso sí, tu bolsillo será el gran perjudicado a la larga.[/nextpage][nextpage]
Usar aire acondicionado y ventilador de manera combinada
El ventilador también es una gran ayuda, pero es evidente que sus efectos no se acercan a los del aire acondicionado, pues no consigue prácticamente rebajar la temperatura. Pero ¿y si somos capaces de combinar el uso de ambos de una manera estratégica que nos permita bajar la temperatura evitando que tengan que estar funcionando todo el tiempo?[/nextpage][nextpage]
Notaremos mucho más la sensación de frescor en la piel
Eso es lo que nos han explicado los investigadores de Sidney. Han encontrado la manera de que podamos bajar unos grados la temperatura de la habitación sin que el aire acondicionado tenga que estar encendido todo el tiempo. Un truco perfecto para emplear entre otros momentos a la hora de conciliar el sueño.
Y es que al parecer, si conseguimos colocar el ventilador en un lugar adecuado, podemos sentir como nuestra piel se refresca aunque el aire acondicionado se mantenga a 29 grados. [/nextpage][nextpage]
La explicación de los investigadores de la Universidad de Sidney
Se trata por tanto de ir probando combinaciones para ver cuál es la que mejor se ajusta en la estancia en la que estemos. Eso sí, es importante que las aspas del ventilador giren al menos a una velocidad media alta, de unos 0,8m/s. Este truco funciona muy bien cuando la temperatura exterior no supera los 40 o los 42 grados. Según los investigadores: “Los ventiladores generan velocidades de aire más altas en la superficie de la piel, lo que eleva el coeficiente de transferencia de calor por convección. Producen una tasa similar de pérdida de calor por convección desde la piel que las que produce el aire acondicionado”.[/nextpage][nextpage]
A qué temperatura se debe usar el aire acondicionado para pagar menos
Por otro lado, hay una serie de criterios que también es relevante tener en cuenta a la hora de usar el aire acondicionado. Por ejemplo, la temperatura a la que lo programamos. Subir el termostato de 20 a 24 grados puede marcar una diferencia de uno 20 euros en la factura de la luz a fin de mes. Se calcula que, por cada grado de temperatura que subas, ahorrarás un 10%.
Obviamente, si tienes el aire acondicionado encendido, tienes que tener las ventanas cerradas, y también las persianas bajadas.[/nextpage][nextpage]
Compra un aire acondicionado que sea eficiente energéticamente
Si estás pensando en comprarte un aire acondicionado nuevo, deberías plantearte hacer una inversión un poco mayor y comprar un aparato con etiqueta energética A++ o A+++. Estos cuentan con un modo de ahorro que permite ahorrar hasta un 30% en la factura de la luz.
Además, no olvides limpiar los filtros con la periodicidad adecuada para que el equipo funcione de manera eficiente y además evitar problemas de alergias.[/nextpage]
