El azúcar está en gran parte de los alimentos que consumimos. Se encuentran de manera natural en los alimentos o se agregan a varios alimentos y bebidas. Las fuentes de azúcar en nuestras dietas incluyen frutas y zumos de frutas, refrescos, miel, mermeladas y jaleas, productos vegetales (por ejemplo, salsa de tomate), comidas preparadas, postres y otros dulces. Es casi imposible que alguien que basa su dieta en alimentos procesados y envasados pueda evitar su consumo. Como sabemos, sus efectos sobre nuestra salud son muy perjudiciales. Estos van desde los problemas cardiovasculares y dentales, hasta la diabetes e incluso el cáncer.
3Qué son los azúcares añadidos
Como su nombre lo indica, son los azúcares agregados a los alimentos por los fabricantes, cocineros o consumidores. Se trata del tipo de azúcar que más debemos evitar. Estas pueden ser las cucharaditas que echamos a nuestro café o jugo, o el azúcar que los productos procesados y preparados llevan como ingrediente. En esta lista de productos encontramos los cereales, refrescos, bebidas deportivas y energéticas, mermeladas, helados, yogures, tortas, pasteles, siropes, galletas y golosinas, por mencionar algunos. Se utilizan para mejorar su sabor, textura y color, así como para alargar su duración, como en el caso de los productos de panadería.