El FC Barcelona tiene un grave problema, y no es solo deportivo, o económico. Es en lo que se refiere a su propio estadio, el Camp Nou. Y es que, tras lo visto, la anterior directiva del Barça presidida por Josep María Bartomeu jugó con fuego con el Camp Nou. Un estadio que está pendiente de ser remodelado pero que, mientras tanto, continúa siendo el lugar donde el conjunto azulgrana disputa sus partidos como local.
Después de estar cerrado durante un año y medio por la pandemia, el Camp Nou volvía a abrir las puertas a mediados de agosto. Eso sí, una vez hecha la reparación de 127 patologías, 44 de las cuales eran de carácter grave y urgente. El informe que alertaba de las patologías lo recibió el presidente ex presidente en 2019, pero no actuó por falta de presupuesto. El problema es que esa situación a ido agravándose. Lo repasamos.
2Lo que el FC Barcelona escondía: "un riesgo de seguridad para los usuarios del Camp Nou por el peligro de caída del edificio de piezas"
                                
                            La información que transmite también 'La Vanguardia' es que, a través de la presencia de esas diferentes patologías del Camp Nou, en 44 de ellas cabía la posibilidad de caída de fragmentos del estadio en zonas de paso.
Pese a disponer de dichos informes, originados cuando la empresa japonesa Nikken, ganadora del concurso para construir el 'Espai Barça', inspeccionó el Camp Nou para conocer el estado real del mismo, la anterior Junta no actuó y permitió, a caballo de 2019 y 2020, que se disputaran con normalidad y gente en la grada esos 21 partidos.
Ya en el año 2013 una inspección había señalado que sobre el esqueleto del Camp Nou existían nidos de palomas que podían llegar a los 20 centímetros y que generaban una situación de insalubridad muy grave.





