El Patronato de la Alhambra y Generalife finalizará en los próximos días las obras de mejora en el callejón de la calle Real que da acceso a los restos arqueológicos del Palacio de los Abencerrajes, una actuación ejecutada desde el servicio de Conservación y Protección del monumento para aumentar la accesibilidad en la zona.
Así lo ha destacado la directora general del Patronato de la Alhambra y Generalife, Rocío Díaz, en una nota de prensa tras una visita a las obras, junto al arquitecto conservador del monumento, Antonio Peral.
La intervención, que se enmarca dentro de la programación anual de actuaciones de la Alhambra, permitirá la renovación puntual de acerados y encintados de empedrado, así como la preparación del firme para la pavimentación con terrizo de alpañata y arenas seleccionadas, en el tramo comprendido que va desde la actual Plaza de Santa María de la Alhambra hacia el Palacio de los Abencerrajes.
Una vez finalicen dichos trabajos, que también mejorarán la evacuación de aguas pluviales con la colocación de imbornales, según ha explicado Rocío Díaz, el servicio de Conservación y Protección de la Alhambra continuará su programación de actuaciones en el entorno del Pilar de Carlos V, con el objetivo de reparar pavimentos y bancos de piedra.
Esta singular vía de comunicación tuvo especial importancia a finales del siglo XIX y principios del XX cuando la calle Real terminaba en un «fondo de saco» al morir en el compás del antiguo convento de San Francisco. El acceso a la Alhambra Alta se realizaba, por tanto, a través del callejón que conectaba directamente con la Torre de las Infantas mediante un paseo para carruajes, antes incluso de la excavación de los restos arqueológicos del palacio y del paseo de cipreses que diseñó el arquitecto Leopoldo Torres Balbás.
