La lasaña es un plato que le suele encantar a los más pequeños de la casa (y a los más mayores). No tiene nada que ver una casera con una precocinada. Por lo que no te lo pienses y en lugar de comprarla hecha, intenta hacerla en casa.
Este plato no es tan laborioso como se cree y te va a llevar mucho menos tiempo del que te piensas. Además, tiene sus truquillos para que te quede jugosísima y no se seque. A continuación, te mostramos los errores que cometes y te arruinan la lasaña.
2LA CARNE PICADA DE LA LASAÑA TIENE QUE SER MIXTA
El siguiente elemento de importancia en una lasaña es su relleno. La de carne es la más habitual aunque también se pueden hacer de verduras o de atún, entre otras variantes. Si te has decidido a hacer la tradicional, debes saber que cualquier carne picada no vale como relleno.
Lo recomendado es rellenar la lasaña con carne picada mixta, es decir, que sea a partes iguales de cerdo y de ternera. La mezcla de los dos tipos de carne es lo que le da su sabor característico y si eliminas alguna puede quedarte muy seca. Además, la carne no debe estar demasiado picada.
