Jóvenes huelguistas climáticos piden «ambición» contra el calentamiento global

Los jóvenes de Fridays For Future vuelven a manifestarse este viernes 19 de marzo en una Huelga Climática Global en 700 municipios de todo el planeta para exigir el fin de las promesas vacías contra el cambio climático de los líderes mundiales a los que reclaman una acción «inmediata, concreta y ambiciosa».

Así, en medio de la crisis de salud, económica y sociopolítica los activistas vuelven a manifestarse para poner de manifiesto la «urgencia» de una acción inmediata ante los desastres meteorológicos y climáticos que «ya han devastado varios países este año».

Entre los eventos meteorológicos extremos, recuerdan la reciente tormenta invernal en Texas o los actuales incendios forestales en Argentina que ya han devastado 40.000 hectáreas. Por ello, los activistas alertan de que se deben priorizar acciones concretas en vez de objetivos climáticos «lejanos».

La manifestación será virtual, a través de fotografías y consignas que se expondrán en la página de Internet de Fridays for Future, así como en redes sociales en la mayor parte de los países, aunque también se han organizado algunas actividades presenciales en varios países, entre ellos España.

La joven activista sueca Greta Thunberg, que ha inspirado el movimiento climático de los jóvenes ha declarado: «Cuando tu casa está en llamas, no esperas 10 o 20 años antes de llamar al departamento de bomberos; actúas tan pronto y tanto como puedas».

Por su parte, la joven activista climática Argentina Nicki Becker, las reducciones de emisiones reales y las reducciones de emisiones netas «no son lo mismo». Así, explica que esta última permite compensar las emisiones continuas con métodos inseguros, como la plantación de árboles, y dependen de tecnología que, francamente, no existe en la escala requerida.

«Los científicos afirman claramente que lo que necesitamos no son objetivos cero netos sin sentido llenos de lagunas; lo que necesitamos son objetivos transparentes y legalmente vinculantes que tengan en cuenta los aspectos de justicia y equidad», defiende.

En este contexto, lamentan que pese a «todas las calamidades climáticas», los activistas «en lugar de ser escuchados, están siendo silenciados». «Hemos visto persecuciones y arrestos de activistas climáticos y ambientales de todo el mundo, como India, Uganda, Filipinas, Países Bajos y más, añade.

Mientras, el activista de Fridays For Future de Filipinas Jon Bonifacio ha denunciado que los líderes mundiales «saben» que los jóvenes que luchan contra el sistema actual «son una amenaza para preservar el status quo».

«Sin embargo, lo que no saben es que silenciar a los activistas es solo un signo de debilidad, no de poder; cada instancia de persecución fortalece nuestro movimiento, porque cuando un individuo es arrestado, todo el movimiento colectivo se une y lo respalda», ha defendido.

Junto con su llamamiento mundial #NoMoreEmptyPromises (No más promesas vacías la activista mexicana María Reyes apunta a las personas que están en el poder que «ya es suficiente». «No se dan cuenta de que todo está conectado estructuralmente y, con sus decisiones demasiado escasas y tardías, también están cavando su propia tumba, pero los primeros en caer no serán ellos, sino las comunidades más vulnerables. Necesitamos acción inmediata ahora y no aceptaremos nada más», ha insistido.

Desde hace dos años, cuando surgió el movimiento de jóvenes activistas climáticos, se han manifestado y realizado huelgas en todo el mundo para reclamar justicia climática. Ahora, a consecuencia de la pandemia del COVID-19 informan de que las acciones tomarán «diferentes formas en diferentes lugares» pero en todo caso, llaman a la unión de las personas más allá de las fronteras bajo el mismo objetivo de acción climática inmediata.

En línea con su primer punto de acción inmediato de desinvertir en la industria de los combustibles fósiles, los activistas climáticos de más de diez países realizaron sus huelgas frente a las oficinas de Standard Chartered Bank en su país.

Para la activista Salsabila Khairunisia de Indonesia a acusado a Standard Chartered Bank de ser un «asesino del clima» porque continuamente financia la «destrucción» de su país, prestando dinero a las empresas de carbón que destruyen el futuro. «Acabamos de experimentar las mayores inundaciones en el sur de Kalimantan en los últimos 50 años y ocurrió debido a la deforestación realizada por compañías de carbón, como Adaro Energy, financiada por Standard Chartered Bank. Esto debe terminar», reclama.

J