Aragón aguarda en el Museo de Barbastro-Monzón la llegada desde Lleida de las obras

Representantes de la Diócesis de Barbastro-Monzón y del Gobierno de Aragón, con el obispo, Ángel Pérez, y el consejero de Educación, Cultura y Deporte, Felipe Faci, a la cabeza se han reunido en el Museo Diocesano de Barbastro-Monzón a la espera de que se cumpla la sentencia y el mandato judicial de entrega de los 111 bienes de las parroquias aragonesas conservados en el Museu de Lleida.

El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Barbastro dictó en 2019 que estas obras de arte eran propiedad de las parroquias aragonesas pertenecientes a la Diócesis de Barbastro-Monzón, y el pasado 17 de diciembre emitió un auto de ejecución provisional para el retorno de estos bienes antes de este lunes, 15 de febrero.

El auto señalaba, asimismo, que contra el mismo no cabía interponer recurso alguno y que, en el caso de no cumplirse el plazo, se establecerían «multas coercitivas y mensuales, además de responsabilidades penales», ha recordado el Gobierno de Aragón en una nota de prensa.

Coincidiendo con esta fecha, el obispo de Barbastro-Monzón, Ángel Pérez, y el consejero de Educación, Cultura y Deporte, Felipe Faci, se han reunido en el museo, donde han podido comprobar el operativo preparado para recibir las 111 obras de 44 parroquias aragonesas y los espacios preparados para su posterior exhibición.

El consejero Faci ha recordado que el Gobierno de Aragón invirtió diez millones de euros en este espacio para que los bienes retornados tuvieran un lugar «digno y totalmente equipado para mostrar a toda la ciudadanía estas obras de arte desde el primer día».

También ha manifestado que, a pesar de su valor patrimonial, las 111 piezas tienen también «gran valor sentimental» y ha mantenido su compromiso con la conservación, el mantenimiento y la protección de todo el patrimonio de la comunidad autónoma.

DÍA HISTÓRICO

El obispo de la Diócesis de Barbastro-Monzón, Ángel Pérez, ha calificado este día de «histórico» y ha tenido un recuerdo para todas las personas que han trabajado en los últimos 25 años por este fin, así como para las 44 parroquias aragonesas propietarias de los bienes que tiene que devolver Lleida.

«Al iniciar este proceso, sabíamos que el camino no sería sencillo», pero desde el obispado se ha luchado para que estos 111 bienes «regresen a sus legítimos propietarios» porque se trata «de un asunto de dignidad y de justicia con el pueblo aragonés, que trasciende lo artístico e incluso lo religioso», ha glosado el prelado.

El obispo ha agregado que el museo y su personal «están listos para recibir las obras» desde hace diez años, ya que se construyó entre otros fines para albergar estos bienes y su discurso museográfico así lo contempla.

Por su parte, el consejero Faci ha comentado que el museo diocesano «está preparado desde el primer día» para acoger estas obras, «que no pueden estar en mejor sitio» y «no deben estar en ningún otro».

PERFECTAS CONDICIONES

El consejero y el obispo han podido comprobar cómo el museo se encuentra en «perfectas condiciones» para recibir las piezas, han apuntado desde el Departamento de Cultura de la comunidad autónoma.

Las citadas fuentes han recordado que la Diócesis de Barbastro-Monzón ha sido el principal demandante en esta causa judicial y el Gobierno de Aragón ha actuado como coadyuvante. En este sentido, el consejero Felipe Faci ha vuelto a reiterar al obispo su colaboración en todo lo que precisen.

También se ha referido a la reciente reunión del prelado con el presidente de Aragón, Javier Lambán, quien ofreció a la diócesis su ayuda en todos los requerimientos del obispado, tanto para prestar asesoramiento técnico para su instalación en el museo, e incluso la restauración de aquellas obras que lo necesiten, como en el apartado judicial.

Algunos de los 111 bienes que deben volver son los frontales de altar de Sant Hilari de Buira y de San Vicente Treserra; la Virgen María con el Niño de Zaidín; varias piezas litúrgicas de Roda de Isábena; el retablo de Santaliestra, el cuenco de Benavente, o los retablos de Binaced y de Algayón.

PRECEDENTE DE SIJENA

El Gobierno de Aragón ha expresado que esta causa no es la primera en la que los tribunales fallan a favor de las aspiraciones de la comunidad autónoma respecto al retorno de bienes artísticos y patrimoniales de propiedad aragonesa ubicados en territorio catalán.

Así, en el Monasterio de Sijena se exponen desde el año 2017 las 95 obras retornadas desde el Museu Nacional d’Art de Catalunya (MNAC) y del Museu de Lleida y que la justicia consideró que debían volver a su lugar de origen.

Precisamente, el viernes pasado se retomaron las visitas a los antiguos dormitorios del Real Monasterio de Sijena, tras las obras llevadas a cabo por el Gobierno de Aragón para restaurar la capilla de la Inmaculada, que ha supuesto una inversión de 255.000 euros, y tras el cierre obligado por la pandemia sanitaria de la COVID-19.

El Gobierno de Aragón y la entidad propietaria del Monasterio de Sijena –la Orden de Malta– han firmado recientemente un convenio de colaboración para continuar con la exhibición de las piezas recuperadas de Cataluña en su lugar de origen.

Desde la pasada semana, han vuelto a abrir las zonas expositivas situadas en los antiguos dormitorios y la sala capitular, en horario los viernes y sábados, de 10.00 a 14.30 horas y de 16.00 a 20.00 horas y los domingos de 12.00 a 14.30 horas y de 16.00 a 20.00 horas.

En el caso de Sijena, el Pleno de la Sala Primera del Tribunal Supremo reconoció la propiedad aragonesa de los bienes que fueron recuperados del MNAC y del Museu de Lleida, declarando la nulidad de las ventas de estos objetos artísticos procedentes del Monasterio de Sijena a la Generalitat de Catalunya y al MNAC.