Puig reconoce que «se debieron tomar otras decisiones» en la cabalgata de Valencia

El ‘president’ de la Generalitat, Ximo Puig, ha reconocido este jueves que «visto el resultado, evidentemente se debieron tomar otras decisiones» respecto a la celebración de la cabalgata de Reyes Magos de València, aunque ha rechazado la «confrontación estéril».

«En la Comunitat Valenciana estaban desaconsejadas absolutamente todas las cabalgatas, y en la inmensa mayoría de los municipios no se produjeron», ha recalcado en declaraciones a ‘Espejo Público’ recogidas por Europa Press.

Puig ha defendido esta postura después de que en la víspera de Reyes se concentraran centenares de personas en la plaza del Ayuntamiento de València para ver la llegada de Melchor, Gaspar y Baltasar. Tanto la oposición como su partido (PSPV) denunciaron que se mantuviera este acto y cargaron por ello contra Compromís, socio de los socialistas en el gobierno local.

En cualquier caso, ha remarcado que no se puede «estar permanentemente en este espacio de la discusión y la confrontación estéril». «Las administraciones tenemos que trabajar juntas para conseguir la causa común, tenemos que dar ejemplo en todo momento», ha reivindicado.

Tras apelar a la corresponsabilidad de los valencianos, ha defendido que «es evidente que hay que ser más prudentes que nunca» y ha justificado que por eso se han tomado «decisiones muy duras y difíciles que tienen consecuencias económicas».

Sobre la situación de la pandemia, Puig ha reiterado su preocupación por el «repunte muy grande» en las últimas semanas en la Comunitat, tras estar «en el flanco de bajo impacto en España» desde marzo. «Por eso tomamos nuevas medidas muy duras antes de Navidad y muchísimas personas se vieron afectadas por no reencontrarse con sus familiares», ha constatado.

Dicho esto, ha agradecido el esfuerzo enorme que han hecho los valencianos estas fiestas, porque «que haya unos cuantos irresponsables no quiere decir que la inmensa mayoría fue responsable». Y ha puesto en valor el papel de los cuerpos de seguridad al «abortar en cierta medida la ‘tardevieja'».

VACUNAS

De cara al futuro, ha confiado en la vacunación como la «gran esperanza» y ha pedido que se haga con «seguridad, eficacia y rapidez», además de destacar los «potentes» equipos de atención primaria y salud pública que dirigen este plan. Ha puesto como ejemplo el aumento de vacunas de la gripe distribuidas en la actual campaña, de 700.000 a 1,3 millones.

Puig ha recordado que el objetivo es que todas las residencias sin brotes estén vacunadas el próximo martes, 12 de enero, y que en las próximas semanas se extiendan a los ambulatorios para el personal sanitario más cercano a la población.

Y ha confiado en que «inmediatamente» se pondrá en marcha la distribución de la nueva vacuna de Moderna para los hospitales, mediante «una hoja de ruta adecuada para conseguir la inmunización de todos los sectores esenciales». «Lo fundamental es que cojamos esa velocidad de crucero», ha defendido como dijo el ministro de Sanidad, Salvador Illa.