Que no te timen: las estafas en la lotería de Navidad más habituales

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Con el arribo de la Navidad, son muchos los desafíos que tienen que pasar las personas de cara a no acabar en estafas por la supuesta lotería que se hace notar con mucha fuerza en esta época. Y es que, en cierta forma los estafadores toman la fecha, donde las personas suelen estar más felices, emocionados con las compras y todo aquello que implica encuentro entre familias. Sin embargo, siempre debes estar al pendiente de lo que haces, porque es mejor prevenir que lamentar. Mira que este tipo de personas inescrupulosas andan por todos lados en busca de víctimas que muchas veces suelen caer.

Las autoridades nacionales han enfatizado la importancia de prevenir cualquier tipo de actos de esta categoría, y no quedarse callados si sospechas de alguien o han tratado de estafarte. Estamos en presencia de bandas organizadas que tienen estrategias muy puntuales en su accionar que tienes que conocer. Es de esa forma en la que no podrás caer en sus artimañas que han puesto entre la espalda y la pared a una gran cantidad de ciudadanos de este país. Descubre cómo operan estas personas, y lo que debes hacer en dado caso te veas en un episodio similar.

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El tocomocho

Un dicho muy popular sostiene que hay clásicos de estafas que siempre siguen vigentes, es decir, no mueren. Ya hemos abordado varios escenarios sobre el sorteo de la lotería de Navidad que suelen tomar esta fecha porque es la más movida del año.

Y es que, ya las fuentes policiales tienen tras la pista un práctica que se basa en coger a alguien para hacer la simulación de que sí fue premiada, y ubicar la víctima, a la que de una forma rara le indica que puede coger una parte de ese premio, si le ayuda a hacer los procesos para cobrar el premio que alega haberse ganado.

Desde luego que todos están en una red delictiva que buscan crear boletos falsos, pero a simple vista parecen verdaderos. Por lo general, el estafador se mete en el papel de una persona discapacitada, que no puede valerse por sus propios medios, buscando como dar lástima para que le ayude esa víctima que ha caído en sus manos.