¡Ahora caigo! cumple 2.000 programas: diviértete con sus caídas más catastróficas

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¡Ahora caigo! cumple el próximo lunes, 23 de noviembre, 2.000 programas. En muchas ocasiones, los realities televisivos absorben la atención de la audiencia: conocemos a todos sus personajes, suceden imprevistos que los hacen noticia y su emisión pasa a la realidad de la noche a la mañana con las redes sociales. Pero, lo cierto es que hay otros formatos que también eclipsan en la televisión y que, aunque no nos demos cuenta, están presentes en nuestro día a día: los concursos.

Saber y ganar’, ‘Pasapalabra’, el próximamente recuperado ‘¡Allá Tú!’, ‘La ruleta de la suerte‘, ‘¡Boom!’… Son muchos las competiciones entre anónimos con el fin de conseguir dinero que, con el tiempo, se han convertido en los espacios más duraderos de la parrilla. Y este 2020, es ¡Ahora caigo! quien está de celebración. El concurso que presenta Arturo Valls cumple 2.000 tardes en antena, y para ello, Atresmedia tiene preparada una gran fiesta. Te contamos lo que la cadena tiene preparado para el número redondo y algunas de las caídas más graciosas y catastróficas de todo el programa.

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Se resiste a caer

Hubo un concursante que no quería tirarse por la trampilla. Tras preguntar varias veces si ya iba a caer, quitarse las gafas por si se abría la puerta -pues los concursantes tienen que quitarse las gafas para que no salgan volando al caer- y convertirse en uno de los más graciosos que han pasado por el programa, Arturo Valls decidió dejarle un rato más en emisión. Eso sí, una vez ya había participado y sin posibilidad de continuar. Como mero espectador.

«No hace falta que estés en tensión pero tampoco te relajes», le decía Arturo Valls. Una petición que no era muy segura y por la que el público se echó a reír, mientras el concursante no para de hacer gracias simulando que iba a caer por la trampilla. ¿Qué pasó al final?

Antonio, como se llamaba el concursante, se convirtió en el primer concursante que no cayó por la trampilla de ¡Ahora caigo! y se fue a su casa con el concursante que ganó el premio, a pie, por la puerta. «Se lleva el premio y a Antonio de regalo», exclamó el presentador al ganador. Sin duda, un momentazo en toda regla, que si ves, te partirás de risa.