El PP denuncia que la campaña electoral de Sánchez costará 300 euros a cada contribuyente

El PP denunció este lunes que el proyecto de Presupuestos Generales del Estado presentados por el Gobierno forman parte de la «larga y costosa» campaña electoral del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, de cara a los comicios de mayo, y que costará a cada contribuyente 300 euros.

En rueda de prensa en el Congreso de los Diputados, el portavoz de Presupuestos del PP, Jaime de Olano, subrayó que todos los analistas económicos han puesto en duda las grandes cifras de esas cuentas, que no son «las que necesitan» los españoles, solo son las que necesita Sánchez «para mantenerse en La Moncloa, subido al Falcon».

Aunque el Gobierno dice que son «los más sociales de la Historia», Olano denunció que en realidad los Presupuestos son «socialistas y populistas» y contienen menos crecimiento, más déficit, menos empleo y más deuda, y como consecuencia de todo ello el «habitual despilfarro» de los gobiernos socialistas y «subida masiva de impuestos» que además es «innecesaria».

Denunció, además, que los ingresos están «sobreestimados», sobre todo los vinculados a la llamada ‘tasa Google’ y al impuesto sobre las transacciones financieras, y que el Gobierno pretende hacer una «trampa» con el IVA «sacándose de la manga un mes trece», que Europa no consentirá.

Olano agregó que el «gran giro social» que el Gobierno esgrime son en realidad medidas que ya aprobó el PP y «obra pública», que en Sanidad el Ejecutivo solo ofrece «más propaganda» porque la partida aumenta solo un 0,9% y que la inversión de 1.500 millones en Educación que reclamaba el PSOE y por la que se levantó del pacto de Estado se ha quedado «en la décima parte», lo cual demuestra el «sectarismo» con el que actúa ese partido.

El PP, precisó, comparte el reparto de las infraestructuras entre las comunidades autónomas, pero no que la inversión en Cataluña crezca el 60% y apenas una media del 25% en La Rioja, Galicia o Ceuta, donde no gobiernan los socialistas ni los independentistas, ni ningún partido de los que aprobaron la moción de censura.