Más de ocho millones de alumnos comienzan estos días en España el curso escolar 2019-2020 en 28.000 centros educativos no universitarios del Régimen General (que incluye las etapas de Infantil, Primaria, Secundaria y Educación Especial).
Según los datos oficiales de 2019, el grupo más numeroso es el de la etapa inferior, Infantil, que cuenta con más de 10.000 alumnos. La escolarización es del 96,3% a los tres años, aunque desciende a los 16 hasta el 96%.
Asimismo, en las aulas españolas trabajan más de 680.000 profesores, que en su mayoría son mujeres (el 66%).
Aunque en algunas comunidades autónomas ya ha arrancado el nuevo curso, esta semana lo harán el resto de centros.
¿Cómo debe ser la cena?
A la hora de organizar cómo debe ser la cena de los niños que vuelven a clase hay que diferenciar en si han comido en el comedor o fuera del centro escolar.
Si lo hacen en el cole, los pediatras aconsejan a los padres tener en cuenta los menús de los comedores escolares a la hora de confeccionar las cenas con el propósito de asegurarse de que tienen una dieta variada y equilibrada y que todos los días consumen fruta y verdura.
Recomiendan decantarse por las frutas y verduras de temporada, puesto que además de estar más sabrosas, contribuyen a tener un menú diverso y a que los niños aprendan a comer todo tipo de alimentos.
Del mismo modo, abogan por reducir el consumo de sal a 3 gramos al día en los menores de 7 años; 4 gramos diarios entre los 7 y 10 años y 5 gramos/día para los adultos.
Los pediatras recomiendan no convertir la cocina en un restaurante: es decir no hacer una cena para adultos y otro para niños. Todos tienen que comer lo mismo.
A la hora de elegir el menú los expertos recomiendan un primer plato a base de verduras: ya sea hervidas, en puré o rehogadas.
De segundo nada mejor que apostar por carne roja, pollo, pescado o huevos. Lo mejor sería ir alternando.
Por supuesto el postre debe estar compuesto de fruta o yogur. Tampoco está de más un vaso de leche antes de acostarse.
(SERVIMEDIA)
