Dimite el director de Información de Moncloa salpicado por el espionaje de Villarejo a Iglesias

El director general de Información Nacional del Gobierno de España, Alberto Pozas Fernández, dimitió este viernes salpicado por el escándalo político que ha suscitado el supuesto espionaje que el excomisario José Manuel Villarejo realizó al secretario general de Podemos, Pablo Iglesias.

Pozas dio a conocer su decisión esta tarde, después de que presentara su renuncia ayer al secretario de Estado de Comunicación, Miguel Ángel Oliver, y de que este viernes fuera aceptada. «Estoy siendo utilizado para atacar al Gobierno y al presidente, y eso no lo puedo permitir», declaró.

El hasta ahora director general de Información Nacional de la Secretaría de Estado de Comunicación fue nombrado el pasado 22 de junio después de muchos años al frente de la revista ‘Interviú’.

Durante esa etapa, Pozas habría entregado en 2016 a Villarejo una memoria USB con el contenido del teléfono móvil de Dina Bousselham, la asistente de Iglesias durante su etapa en el Parlamento Europeo. Al menos así lo declaró el propio Villarejo la semana pasada en su declaración ante la Audiencia Nacional.

El manejo de esta información por parte de Villarejo ha suscitado en la última semana fuertes críticas desde Podemos, desde el PSOE y desde el Ejecutivo contra la anterior cúpula del Ministerio del Interior, al considerar que bajo el mandato del Partido Popular se puso en marcha una operación para impedir un pacto entre socialistas y podemistas cuando Mariano Rajoy rechazó la propuesta del Rey para someterse a una investidura por no contar de los apoyos suficientes.

Pozas explicó este viernes a los periodisats que habitualmente cubren la información del Ejecutivo que, al aceptar el cargo en La Moncloa, hizo un «breve repaso de las cosas pendientes que heredaba de la dirección de ‘Interviú'» pero, «en ningún momento» valoró que «un asunto que en otras circunstancias podría ser menor fuera a convertirse en una especie de bomba informativa en plena campaña electoral».

Ante las consecuencias que puede tener para el Ejecutivo de Pedro Sánchez en plena precampaña electoral, Pozas presentó el jueves su dimisión y este viernes ha sido aceptada tras el Consejo de Ministros. Con esta decisión espera que quienes pretendían mezclar su nombre «con la conocida como ‘policía patriótica’ vean que estaban muy equivocados, algunos a sabiendas, y que quienes se dejan ofuscar por la tinta del calamar se den cuenta de la labor de despiste y puedan perseguir al calamar».