Actualmente el FC Barcelona está convertido en un auténtico polvorín, que terminó de estallar con el anuncio de Lionel Messi que dijo que quiere abandonar el club este mismo verano. Tanto el delantero argentino como Josep Maria Bartomeu, presidente de la entidad catalana mantienen un silencio sepulcral, pero todo indica que el divorcio es total y el crack acabará concretando la salida más dolorosa en la historia del equipo blaugrana. Sin embargo, aún muchos guardan la esperanza de que el rosarino se mantenga en conjunto culé, aunque por ahora el plan de recambio del mandatario azulgrana no parece convencerlo para nada.
Con la salida más que cantada de Luis Suárez, al que Ronald Koeman ya le comunicó que no contará con él la próxima temporada, Messi está completamente desencantado. Al ser el uruguayo un referente en la plantilla, uno de los máximos anotadores de al historia del Barça y, además, parte del círculo cercano del argentino, no cayó nada bien el anuncio de su marcha; aunque mucho menos lo hizo el posible recambio que tiene en mente la directiva para remplazarlo. El elegido es, nada más y nada menos, que Carlos Fernández.
Un buen recambio para el Barça
Desde la prensa se destaca que la falta de dinero es realmente grave, por lo que hacer un fichaje de proporciones descomunales, de esos que encantarían a Messi, está totalmente descartado. Por eso la apuesta sería por una más conservadora, pero no por eso menos efectiva. El atacante andaluz fue una de las revelaciones de la campaña con un Granada que se metió por primera vez en su historia en competiciones europeas. Sus 13 goles colaboraron mucho con al acusa granadina y ahora el Sevilla de Lopetegui, club al que pertenece su ficha, deberá decidir que hace con él.
Aunque primero se deberá determinar que se hará con jugadores como Martin Braithwaite, al que se le busca una salida pese a que no tuvo muchas oportunidades para mostrar su potencial, la realidad es que el equipo quiere hacer una revolución en toda las líneas y si es con jugadores a un buen precio, pues mucho mejor. En esa categoría destaca un Carlos Fernández que tiene la calidad y la juventud suficiente para partir con humildad desde el banquillo y tratar de ganarse el puesto con su juego. Su fichaje costaría unos 20 millones de euros, una cantidad aún asumible por los azulgranas; más si se logran concretar algunas ventas (Rakitic, Vidal…).
Carlos Fernández también gusta al Benfica
Pese a que el nombre del Barcelona esté sobre la mesa, la prisa para cerrar el fichaje será clave. Esto debido a que Carlos Fernández también es seguido por el Benfica. La escuadra portuguesa no piensa rendirse y luchará por conseguir al delantero, al que ya toda la prensa coloca en Portugal la próxima campaña.
Con mucho margen para mejorar, dado lo que ha demostrado y su juventud (24 años), puede que sea una buena inversión para el Barcelona, pero no para un Messi al que no le convence para nada el nuevo proyecto que quiere armar ala directiva y Koeman. La decisión del argentino ya tiene tintes de ser irreversible y todo indica que con fichajes como el del andaluz no lograrán hacerlo cambiar de opinión.
