¿Por qué no se puede ser como esas mujeres refinadas que saben cómo limpiar las huellas de los dedos en una copa? Algunas adquirieron ese conocimiento leyendo revistas y otras lo aprendieron de niña. Parece que ser elegante y distinguida es algo que se lleva en la sangre, ¿por qué parece costar tanto?, una de las respuestas que vienen a la mente es, sin duda, que se ama la comodidad y lo simple. Sin embargo, llegan esos días en el cual es necesario saber sobre trucos como el antes descrito. No querrás alterarte cuando veas a las personas criticar tus copas sucias.
Existen mucha maneras de limpiar las copas. Este artículo comenzará desde las formas más conocidas a las menos usadas. Después de que leas esto, sí podrás hacer esa reunión en donde festejarás la graduación de tu hija, ¡ha llegado tu momento!, ¡destácate!
Lo tradicional
Puede que estés nerviosa porque temes no quitar esas huellas en una copa, objeto que serán el protagonista al momento de dar el discurso que llevas practicando un mes entero o quizás más. Probablemente comienza con algo así: «Muchas gracias a todos por estar aquí, hoy celebramos la graduación de mi niña, que ya es toda una mujer profesional…», sin duda querrás todo lo mejor para ese día.
Debes tener los siguientes elementos para comenzar con la limpieza: esponja, agua tibia y jabón neutro, ¡tan fácil!, así es. En una taza en donde tendrás el agua tibia debes sumergir las copas. Dentro de ellas pon jabón neutro y rellénalas con agua. Hecho este paso, es el momento de frotar las copas agarrándolas desde el soporte. Posteriormente, retira la espuma con abundante agua y añade unas gotas de vinagre, ¡no es todo el producto, no!, solo unas gotas. El siguiente paso es secarlas con un trapo de microfibra.
La magia del vinagre
Si en el procedimiento anterior solo añadiste unas gotitas para que tu copa quedaran reluciente, en esta truco el vinagre es el protagonista. Con mucho cuidado esparce dos cucharadas de vinagre en un paño de microfibra. Comienza a frotar toda la copa cerciorándote que no queden rastros de sucio. Sumérgelas en agua caliente y seca.
El resultado son lindas copas que brillan y agradecidas por esa limpieza.
¿Pasta de dientes?
En esta ocasión para limpiar tu copa necesitarás todo los ingredientes que empleas cuando te vas a cepillar: pasta de dientes y un cepillo. No uses tu cepillo diario, ¡ojo que te conozco!, ¡está bien!, ya que agarraste el de tu esposo, lee atentamente:
Vas a incorporar un poco de pasta dental en tu mano y comenzarás a esparcirla por toda la copa, no dejes espacio de nada. Con el cepillo dental borra las manchas que están sobre ella, no es necesario que tu fuerza recaiga en la copa. El siguiente paso es enjuagarlas con abundante agua caliente y con un trapo de microfibra, seca – ¿por qué cumplir el último paso con un pañuelo así- para no dañar el cristal. Si usas una tela normal correrás el riesgo de rayarla o dejar marcas indeseadas.
El truco de la abuela
Las abuelas nunca se equivocan. Su experiencia la hacen ser poseedoras de la verdad y más si se habla sobre temas de hogar, son las mejores. Ellas recomiendas tener dos elementos: una cacerola de esas con la que calientas el agua para bañarte y unas servilletas, las que te sobraron del último cumpleaños que celebraste.
Vas ubicar la copa sobre la cacerola con agua hirviendo. No es dentro de la cacerola, es sobre ella para permitir que el vapor la cubra por completa. Cuando ocurra esto, con las servilleta, con mucho cuidado, vas frotando.
Este truco es tan efectivo como los anteriores y más barato. Lo increíble que esas manchas que creíste imposibles de sacar, esa grasa incrustada en estos vasos, desaparecerán, ¡quién oye consejos, llega a viejo!
Toma en cuenta esto
Posiblemente tengas en tu casa no solo copas de cristal sino copas de vidrio. Ten en cuenta que las copas de vidrio no contienen plomo y son gruesas por lo que cuesta percibir con mayor dificultad el aroma de la bebida. Si embargo, para los eventos de muchas personas suelen ser las escogidas porque su precio es menor y si se extravía una, no será muy significativo el dinero perdido.
Las copas de cristal, por su parte, son más costosas y delgadas, por lo que hay que tener más cuidado. Su apariencia denota finura y elegancia. Estos vasos sí poseen plomo y es posible conservar la temperatura del vino.
Este conocimiento te permitirá elegir cuál se adecua mejor a la reunión que quieres hacer. Por ser la graduación de tu hija, lo más seguro es que quieres lo mejor para ese momento. Sin embargo, las limitaciones económicas a veces impiden que podamos disfrutar de cosas como las copas de cristal.
Consejos adicionales
Al momento de guardar una copa considera que no debes ponerla junto a otros objetos porque se pueden rayar. Cuando vayas a lavarlas, agarra la copa por el cáliz y trasládala de una en una. La experiencia de una amiga, por cuestión de rapidez la llevó a trasladar las copas al mismo tiempo a la cacerola caliente y se le cayeron todas, fue triste ese momento, lloró la pobre.
Lavas las copas frecuentemente y no las pongas bocas a bajo porque el peso puede dañar los bordes. No uses detergente tradicional para limpiarlas, siempre jabón neutro, de lo contrario puedes alterar el sabor del vino. Lo más segura es que te hayas esmerado por poner sobre la mesa el mejor vino y de repente su aroma destile jabón de bebé. Verás como muchos arrugan la cara.
En tu mente solo hay cabida para que ese momento salga espectacular y estos trucos te llevarán al éxito. Si quieres déjanos tus comentarios para saber el cómo te fue y nos compartas qué tipo de vino, qué tipo de copa y que truco decidiste usar para limpiar tus recipientes.
