Más allá de si nos gusta más o menos reunirnos con familiares y amigos, la Navidad se han convertido en una de las épocas de mayor movimiento económico del año en España. Este 2025, pese a la persistente subida de precios y la presión inflacionaria que sigue afectando a alimentos y productos básicos, los españoles parecen dispuestos a mantener —e incluso aumentar— su gasto en regalos navideños.
No hay más que echar un ojo a los datos de un reciente estudio de Aladinia.com, que concluye que el español medio tiene previsto comprar unos siete regalos durante estas fiestas, uno más que en 2024.
Lo hará destinando una media de 240 euros en total, una cifra supone un ligero incremento con respecto al año anterior, reflejando tanto una mayor predisposición al regalo como una cierta presión por adaptarse a las expectativas sociales y familiares propias de estas fechas.
En un contexto donde diferentes estudios señalan que el gasto general navideño —incluyendo alimentación, ocio y lotería— puede superar varios cientos de euros por consumidor, queda claro que el apartado dedicado exclusivamente a regalos sigue siendo uno de los más relevantes del presupuesto familiar.
Más regalos y mayor planificación
Los datos dejan claro que la mayoría de los españoles empieza su búsqueda de regalos con bastante antelación. Tres de cada diez encuestados afirman que compran los regalos con más de un mes de margen, mientras que más de la mitad lo hace con varias semanas de anticipación, un hábito que se ha intensificado en un contexto de incertidumbre económica.

La forma de comprar también está en evolución: solo un 6 % dice que compra exclusivamente en tiendas físicas, mientras que el 30 % opta por compras totalmente online y el 64 % restante combinará ambos formatos. Esta tendencia híbrida muestra cómo lo digital ha ganado terreno incluso en tradiciones tan arraigadas como la compra de regalos navideños, aunque muchos consumidores todavía valoran la experiencia física de ver y tocar los productos antes de decidirse.
Aun así, no todos los destinatarios de regalos navideños tienen el mismo peso en el presupuesto. El estudio subraya que la pareja y los hijos son los principales beneficiarios del gasto, seguido de cerca por padres, nietos, hermanos, primos y amigos.
A pesar del entusiasmo general por regalar, las preocupaciones no desaparecen. Más de la mitad de los encuestados reconoce que no sabe exactamente qué regalar, porque siente que sus seres queridos "ya tienen de todo".
Pero, ¿qué se regala en Navidad?
La encuesta mencionada también ofrece pistas sobre las preferencias a la hora de elegir regalos. Este año, los regalos relacionados con ocio y experiencias originales destacan como los favoritos, con un 35 % de los encuestados que planean destinar su mayor gasto a este tipo de obsequios. Estas experiencias pueden abarcar desde escapadas y actividades especiales hasta opciones relajantes como balnearios o spas, con muchos usuarios expresando su preferencia por obsequios que generen recuerdos, no únicamente objetos materiales.
No obstante, los regalos más clásicos siguen teniendo un lugar importante. Ropa, complementos y calzado se sitúan como la segunda categoría más popular, con un 29 % de menciones. Otras opciones más tradicionales, como perfumes, juguetes, tecnología o libros, también figuran entre las elecciones habituales, aunque con menor peso porcentual.
Más allá de lo que se compra, los datos ponen de manifiesto una tendencia interesante: ocho de cada diez encuestados (82 %) preferirían recibir un bono con dinero para gastar en la experiencia que ellos elijan, en lugar de un regalo tradicional. Dentro de estas experiencias deseadas, destacan balnearios y spas, escapadas de fin de semana, experiencias gastronómicas o actividades de aventura.

En cualquier caso, muchos consumidores buscan ahora un valor emocional o vivencial, reforzando la idea básica (y esperanzadora en los tiempos que corren) de que un regalo no se mide solo por su precio.
Un consumo que crece, pero con matices
El panorama general del consumo navideño en España refleja una cierta recuperación del gasto tras años de ajustes y cautela. Informes externos señalan que el gasto total de las familias españolas en Navidad tiende a aumentar, impulsado tanto por regalos como por lotería, alimentación y actividades festivas.
De hecho, según datos del Mastercard Economics Institute, se espera que el gasto en esta campaña crezca alrededor de un 4,8 % respecto al año anterior, con especial dinamismo en moda, belleza y productos relacionados con experiencias.
Sin embargo, no todos los estudios coinciden en el incremento generalizado del gasto: algunas encuestas muestran cómo ciertos consumidores intentan recortar gastos o ser más selectivos, buscando ofertas o incluso planteando regalos de segunda mano como alternativa sostenible y económica.
Sea como fuere, aunque el gasto medio en regalos haya aumentado este año, sigue siendo crucial para muchos ajustar sus presupuestos, comparar precios y planificar con antelación para evitar sorpresas indeseadas al final del mes.
Con todo, las fiestas navideñas de 2025 parecen confirmarse como un momento de consumo significativo en España, donde el gesto de regalar —más que el valor monetario del presente— se reafirma como una de las principales expresiones de afecto y pertenencia. A pesar de los retos económicos, la tendencia a comprar más, gastar algo más y priorizar experiencias muestra una evolución del mercado navideño más que curiosa. ¿Servirá como punto de inflexión?







