Lacón, frutos de mar y empanadas de pescado. La gastronomía de Galicia no se caracteriza precisamente por ser "apta-vegano", pero aun así una ciudad gallega encabeza una lista que la pone por delante de Madrid y Barcelona.
Quien puso el cascabel al gato ha sido Holidu, un portal de alquileres vacacionales, que hizo un ranking de las ciudades con mayor ratio de restaurantes veganos y vegetarianos por cada 100.000 habitantes. Aquí sus resultados.
Santiago de Compostela, capital "veggie" de España
En Santiago de Compostela hay 9.33 restaurantes vegano/vegeteriano por cada 100.000 habitantes, lo que posiciona a la ciudad por encima de cualquier otra a nivel nacional. Concretamente, en la urbe gallega hay cinco restaurantes veganos y cuatro vegetarianos.
Es decir que aunque el churrasco, el lacón y el pulpo sean parte de las recetas más típicas de abuelas y abuelos gallegos, los nietos han optado por el tofu y la leche de soja.
Los creadores del estudio calculan que la primacía de la gastronomía vegana en la ciudad gallega tiene que ver también con el turismo, ya que, al ser punto de confluencia de los miles de peregrinos que transitan el Camino de Santiago cada año, los empresarios gastronómicos de la ciudad han ido progresivamente adaptando su oferta a ese público.
Más allá de las razones, Santiago es la capital vegana de España y, ahora que el dato es de público conocimiento, quizás incluso esa misma oferta siga creciendo, fomentada por las personas que llevan dietas libres de carne que la visitarán para probar sus delicias.
Barcelona, en el segundo puesto
La ciudad condal recibe más de 20 millones de visitantes cada año, lo que la lleva a tener una oferta gastronómica variada. Se imponen los bares de tapas, donde probar exquisitas patatas bravas, calamares y paellas, pero en Barcelona también abundan los locales de comida asiática, empanadas argentinas, kebabs y cafeterías internacionales.
Hay para todos los gustos, incluso para los que llevan una dieta basada en plantas. Por eso, Barcelona ocupa el segundo puesto con 6.48 restaurantes veganos o vegetarianos por cada 100.000 personas que habitan la ciudad.
Los números son sorprendentes. La capital catalana tiene 55 restaurantes veganos y 50 restaurantes vegetarianos.
El lugar que ganó Granada como capital "veggie"
La ciudad de Granada cuenta con 6.01 restaurantes veggies por cada 100.000 personas que habitan en ella, lo que equivale a decir que hay 10 restaurantes veganos y 4 restaurantes vegetarianos.
Granada es una ciudad universitaria, habitada por estudiantes de todas partes de España y del mundo. Por eso, aquí la vida nocturna, las actividades para conocer personas y los restaurantes con ofertas basadas en plantas triunfan.
Otras ciudades en el listado que también tienen "corazón verde"
A Granada, Santiago y Barcelona, le siguen Santa Cruz de Tenerife (5.89 restaurantes veggies cada 100.000 habitantes) y Palma de Mallorca (4.67).
Al final de la fila, pero todavía en el top 10, se encuentran Salamanca, Girona, Segovia, Toledo y Alicante. Todas estas ciudades tienen un ratio elevado de restaurantes de alimentación vegetariana, por encima de la media en España.
La ausencia notoria es la de Madrid, que a pesar de ser la ciudad capital y tener una abrumadora cantidad de universitarios, turistas y habitantes modernos, no tiene un ratio elevado de restaurantes basados en plantas que la haga quedar por encima de las ya mencionadas.
Lo cierto es que, sea por salud, por preocupaciones ambientales o simplemente para sentirse mejor con las decisiones de alimentación, cada vez más españoles llevan una dieta donde predominan las plantas y consumen menos carnes. Además de este ranking, otros datos lo respaldan.
Ni "muy muy", ni "tan tan", abran paso a los "flexitarianos"
Las dietas veggie a nivel nacional ya no están en una curva ascendente como ocurría antes de la pandemia, pero tampoco han desaparecido. Se encuentran en una meseta, representando al 11,1% de la población adulta en España, unos 4,6 millones de personas, de acuerdo a estudios publicados por la consultora Lantern.
Sin embargo, el detalle interesante es quién sostiene realmente esta tendencia. No son los veganos ni los vegetarianos, que han caído y vuelven a niveles de 2019, sino los flexitarianos, que aumentan en 300.000 personas en dos años y ya representan el 9,1% de los adultos.
Otra de las curiosidades es que, incluso entre veganos y vegetarianos, la preocupación animalista cae del 74% al 67%, y la salud empieza a pesar más, pasando del 44% al 19%. Según los consultores, esto se debe a que el contexto económico aprieta y los valores éticos quedan en un segundo plano.
El perfil "veggie" sigue siendo mayoritariamente femenino y joven, con estudios. La mayoría de las veganas viven solas, lo que facilita llevar adelante una dieta restrictiva.
En el plano de los flexitarianos, las cifras están más repartidas. Crece también la preferencia por alimentos frescos frente a los productos plant-based, cuyo consumo baja porque muchos los consideran artificiales y caros. Solo las alternativas vegetales a la leche y el yogur mantienen impulso.






