Es muy posible que en alguna ocasión, a mitad de la noche, te hayas encontrado con un sonido extraño que perturba tu descanso y te hace despertar. Puedes pensar que alguno de tus vecinos se ha puesto a jugar a las canicas en plena madrugada, pero realmente tiene que ver con el pulso de Zhukowski.
Este es un ruido natural que tiene un sonido similar a la caída y el golpe de las canicas, con el que nuestro cerebro lo vincula automáticamente por su semejanza, pero la realidad dista mucho de esta apreciación y existe una explicación científica de la causa de este sonido.
EL RUIDO QUE ESCUCHAS POR LA NOCHE, PUEDE SER EL PULSO DE ZHUKOWSKI

Los sonidos son interpretados por nuestro cerebro de maneras muy diversas, en ocasiones asociándolos con determinados sentimientos, como la hipnótica melodía que daba a los niños tanto miedo y que tenía que ver con la Carta de Ajuste de los televisores.
Aunque en este caso no tiene nada que ver con ella, es posible que en alguna ocasión te hayas encontrado con que, en plena noche, escuchas un ruido que parece similar al impacto de la caída de canicas. Pese a que puedas creer que es cosa de tus vecinos, realmente no tiene nada que ver.
Ese sonido tiene un origen normal dentro de la estructura de una vivienda, y existe una explicación científica que te demuestra que, aunque el cerebro lo asocia con las canicas al escuchar algo muy parecido, realmente se trata del pulso de Zhukowski, más conocido en el argot técnico como golpe de ariete.
¿QUÉ ES EL PULSO DE ZHUKOWSKI?

Aunque no es uno de los sonidos más molestos para el ser humano, el pulso de Zhukowski, que recibe este nombre en honor al ingeniero ruso que estudió este fenómeno de mecánica de fluidos (Nikolái Yegórovich Zhukovski), es un sonido al que hay que prestar atención.
Esto se debe a que es el principal causante de averías en tuberías e instalaciones hidráulicas e involucra tanto a canalizaciones como fluidos, si bien es cierto que, por lo general, solo se trata de un simple sonido, por lo que tampoco conviene preocuparse en exceso.
Los fluidos son ligeramente elásticos, por lo que cuando tiene lugar un cierre brusco de un grifo o válvula instalados en una tubería de cierta longitud, las partículas de fluido que han visto cómo su curso se detenía, son golpeadas por las que vienen a continuación, aun en movimiento.
Esto genera una sobrepresión que se mueve a lo largo de la tubería, llegando al punto en el que se supera la velocidad del sonido en el fluido, lo que tiene varios efectos. El primero es que comprime ligeramente el fluido, y el segundo que dilata mínimamente la tubería, dando lugar a una reverberación.
Cuando todo el fluido deja de moverse, y, por tanto, cesa el impulso, el fluido deja de estar comprimido y se expande, haciendo que la tubería vuelva a recuperar su tamaño habitual. Además, tiene lugar una onda de presión en sentido contrario, con un fluido que se desplaza en la dirección contraria, pero, al haber sido cerrada la válvula, se origina una depresión con respecto a la presión normal.
Con esta bajada de presión, el fluido puede pasar a un estado gaseoso, y si al llegar al otro extremo la onda no se ha visto disipada, irá suavizándose poco a poco por el material de la tubería y el fluido.
¿POR QUÉ SE ESCUCHA MÁS EL PULSO DE ZHUKOWSKI POR LA NOCHE?

El pulso de Zhukowski se escucha más por la noche, pero la causa de que se produzca este golpe se va originando en actos del día a día como abrir y cerrar el grifo o una válvula, lo que hacemos en numerosas ocasiones a lo largo de una jornada, ya sea de forma manual o poniendo en funcionamiento el lavavajillas o la lavadora.
Sin embargo, el golpe de ariete se siente más por la noche, aunque esto tiene una sencilla explicación, y no es otra que en la madrugada existe un mayor silencio, al menos por norma general, sin que haya otros ruidos que puedan taparlos. No obstante, a lo largo del día también se produce e este efecto causado por el denominado pulso de Zhukowski.
MINIMIZAR EL PULSO DE ZHUKOWSKI

Una buena práctica para reducir el riesgo de que se produzcan averías en las instalaciones de tuberías es tratar de minimizar el pulso de Zhukowski, algo que debería hacerse desde el primer momento o al realizar una reforma.
En este sentido, los expertos recomiendan evitar las válvulas de cierre rápido, instalando depósitos de compensación, tuberías de alta presión, válvulas de aire y de purga, o incluso que el cierre manual se realice de una manera más lenta.
Estas medidas en el funcionamiento del diseño pueden ayudar a reducir las posibilidades de que el golpe de ariete pueda provocar diferentes problemas en la vivienda. Entre las consecuencias del pulso de Zhukowski se encuentran los daños mecánicos en tuberías, válvulas y bombas, así como fugas, roturas y debilitamiento de los soportes y uniones del propio sistema.
Igualmente, puede causar ruido y vibraciones, y a largo plazo, la fatiga y rotura de la tubería. En los casos más graves, los daños pueden llegar a provocar accidentes de tal magnitud que pueden llegar a representar riesgos para la seguridad y la salud.
Teniendo en cuenta la ecuación de Zhukowski y cómo afecta a las tuberías, podemos encontrarnos con diferentes consecuencias operativas y financieras. Una de ellas es, como explicamos los ruidos y vibraciones, al tratarse de un fenómeno que genera un ruido metálico característico y vibraciones en el sistema de tuberías.
También ocasiona tiempo de inactividad, puesto que los daños que puede llegar a generar el golpe de ariete requiere de reparaciones o el reemplazo de equipos, lo que lleva a que tengan que afrontarse tiempos de inactividad en la instalación que, en el caso de ser una empresa o negocio pueden llegar a tener un gran impacto. A todo ello hay que sumar los correspondientes costes de reparación.