El consumo de agua es un pilar fundamental de nuestra salud, pero ¿y si te dijera que uno de los consejos más repetidos es un mito que podría perjudicarte? El nefrólogo Dr. Luciano Mendez lo ha dejado muy claro con su reciente afirmación, y es que según sus palabras, el consejo de beber dos litros de agua puede hacer más daño que bien, desmontando una creencia popular muy arraigada en nuestra sociedad.
Esta revelación nos obliga a replantearnos nuestra hidratación diaria. Olvídate de forzarte a beber sin sed, porque la cantidad ideal no es una cifra mágica universal. Tal y como confirma el Dr. Luciano Mendez, esta es la cantidad exacta que debes beber según tus propias necesidades, un cálculo personalizado que depende de factores que seguramente nunca habías considerado y que cambiará tu forma de entender el consumo de este líquido vital.
AGUA ¿ESTÁS SOBRECARGANDO TUS RIÑONES SIN SABERLO?
Beber más de la cuenta no es sinónimo de estar más sano, sino todo lo contrario. Una ingesta desmedida y constante puede poner en jaque a tus riñones, obligándolos a trabajar a un ritmo forzado para eliminar el exceso. De hecho, el Dr. Luciano Mendez insiste en que una sobrehidratación continuada puede diluir los electrolitos en la sangre, generando un desequilibrio peligroso para el organismo y afectando a la función renal a largo plazo.
El problema se agrava cuando ignoramos las señales de nuestro propio cuerpo. La sed es el mecanismo natural que nos avisa de que necesitamos reponer líquidos, pero la hemos sustituido por una regla arbitraria. Según la advertencia del nefrólogo, “el consejo de beber dos litros de agua puede hacer más daño que bien”, ya que nos empuja a un consumo que puede no ser necesario y que, en determinados casos, resulta contraproducente para nuestra salud general.
LA FÓRMULA PERSONALIZADA: CALCULA TU NECESIDAD REAL

Cada persona es un mundo y sus necesidades hídricas también lo son. No tiene sentido que un oficinista sedentario de 60 kilos beba la misma cantidad que un deportista de 90 que entrena al aire libre. Por eso, el Dr. Luciano Mendez subraya que la cantidad de agua necesaria depende directamente del peso corporal y el nivel de actividad física, siendo estos los dos factores más determinantes a la hora de personalizar nuestra ingesta.
Además de tu rutina, el entorno juega un papel crucial en la ecuación. Vivir en un clima cálido y húmedo o realizar ejercicio en un día de verano dispara la pérdida de líquidos a través del sudor. Es en este contexto donde la afirmación de que "el consejo de beber dos litros de agua puede hacer más daño que bien" cobra aún más sentido, pues ignora por completo la influencia de la temperatura y la humedad ambiental en el balance hídrico del cuerpo.
¿SABÍAS QUE TAMBIÉN "COMES" AGUA?
A menudo olvidamos que una porción significativa de la hidratación diaria la obtenemos a través de lo que comemos. Frutas como la sandía o el melón, y verduras como el pepino o el apio, están compuestas por más de un 90 % de agua. Por lo tanto, una dieta rica en productos vegetales contribuye enormemente a alcanzar los niveles de hidratación óptimos sin necesidad de obsesionarse con la botella, un punto que el Dr. Luciano Mendez considera fundamental.
Integrar estos alimentos en tu día a día es una forma inteligente y natural de mantenerte hidratado. No solo estarás nutriendo tu cuerpo con vitaminas y minerales esenciales, sino que facilitarás el trabajo a tus riñones. Recuerda que, como bien indica el especialista, gran parte del líquido que necesitamos ya se encuentra en los alimentos, por lo que la cantidad de agua que debemos beber directamente es menor de lo que popularmente se cree.
ESCUCHA A TU CUERPO: LA SED ES TU MEJOR GUÍA

La naturaleza nos ha dotado de un sistema de alerta increíblemente preciso: la sed. Esta sensación es la forma que tiene el cerebro de decirnos que los niveles de agua en el cuerpo están empezando a bajar. El Dr. Luciano Mendez defiende firmemente que confiar en la sed como principal indicador es más eficaz que seguir una norma externa, ya que se ajusta en tiempo real a las necesidades fisiológicas de cada momento y evita excesos innecesarios.
Desaprender la idea de que hay que beber sin tener sed es el primer paso para una hidratación consciente y saludable. El mantra de "el consejo de beber dos litros de agua puede hacer más daño que bien" nos invita a reconectar con nuestras propias señales internas. Al fin y al cabo, forzar la ingesta cuando el cuerpo no la pide puede sobrecargar el sistema renal, un riesgo que podemos evitar simplemente prestando más atención a lo que nuestro organismo nos comunica.
EL VEREDICTO FINAL SOBRE EL LÍQUIDO ELEMENTO
Adoptar un enfoque personalizado es la verdadera revolución para tu bienestar. En lugar de contar vasos, empieza a observar cómo te sientes, el color de tu orina y tu nivel de sed a lo largo del día. Como nos recuerda una vez más el Dr. Luciano Mendez, "el consejo de beber dos litros de agua puede hacer más daño que bien" porque promueve una visión única para un problema que es multifactorial y profundamente personal, ignorando la individualidad biológica.
Así que la próxima vez que te asalte la duda, recuerda que no existe una cifra mágica. La cantidad ideal de líquido para ti dependerá de si has hecho deporte, de si hace calor o de lo que hayas comido. Asumir que la hidratación es un equilibrio dinámico y no una meta fija te liberará de la presión de cumplir con una regla obsoleta y te permitirá cuidar de tu cuerpo de una forma mucho más inteligente, respetuosa y, sobre todo, saludable