Especial 20 Aniversario

Cada vez más trabajadores renuncian a ascender en el trabajo: «No sería jefe ni por todo el dinero del mundo»

En términos generales, la promesa de las empresas es que los trabajadores comiencen en un nivel inicial y eventualmente puedan ser ascendidos. Con cada cambio de título vienen más beneficios. Pero en los últimos años, el atractivo de ascender en el escalafón ha perdido su atractivo: no solo es más difícil conseguir ascensos, sino que, al mismo tiempo, la gente los rechaza.

Publicidad

Sí, parece que el trabajo nunca ha sido un terreno muy dado a alegrías: la mayoría de las personas, si hacemos una encuesta rápida en nuestro entorno, dirán que trabajan por dinero y solo por dinero y que la felicidad, de existir, la buscan fuera, en otros ámbitos de la vida.

Jóvenes Trabajadores Ascenso Jefe Fuente: Europa Press
Fuente: Europa Press

De todas formas, cuando llega el momento de optar por tener unas supuestas mejores condiciones laborales, tanto salariales como a nivel de exigencia, hasta un 55% de los encuestados por Michael Page rechaza esa mejora o dice ‘no’ a un ascenso en el trabajo.

HASTA UN 55% DE LOS TRABAJADORES EN ESPAÑA NO QUIERE ASCENDER

Y es que, en la actualidad, son varias las generaciones -la Millennial y Z- para las que el éxito laboral en forma de ascenso ha dejado de ser un fin. Los mayores sueldos y el prestigio social han dejado de compensar a muchos jóvenes como ella frente a las jornadas laborales interminables, la mayor responsabilidad y las dificultades para conciliar con la vida personal que acarrea el puesto de jefe. Un cambio en los valores que ha sido bautizado como «ambición silenciosa».

Este informe de MichaelPage deja claro que los trabajadores y profesionales no están dispuestos a sacrificar su salud emocional por su carrera. Tanto es así, que más de la mitad de los encuestados en España han afirmado estar dispuestos a rechazar un ascenso si este afectara negativamente su bienestar, el porcentaje más alto registrado hasta el momento.

Sin embargo, no parece que se esté dando respuesta completamente a esta prioridad. Así lo refleja el hecho de que un 40% de los trabajadores tenga poca o ninguna confianza en que su empresa sepa equilibrar las necesidades del negocio con el bienestar de los empleados.

Trabajadores Ascenso Empresa Fuente: Europa Press
Fuente: Europa Press

«Como decía Henry Ford, ‘tanto si crees que puedes como si crees que no puedes, estás en lo cierto’. Por otro lado, si es una decisión que tomamos con plena conciencia, siendo coherentes con nuestros principales valores y analizando lo bueno como lo malo de un ascenso, es una de las mejores decisiones que podemos tomar», explica la experta y coach Amagoia Eizaguirre, fundadora de la empresa Habituatea.

«Se trata de ser honestos con nosotros mismos, respetarnos y ser las personas que lideramos nuestra vida. Demuestra una autoconfianza, coherencia y claridad en las prioridades de la vida», comenta.

Publicidad

NADIE QUIERE UN PUESTO MEJOR PORQUE CONLLVEA UNA SOBRECARGA DE TRABAJO

En línea con lo anterior, el 80% de los encuestados indicó que su empresa no cuenta con una estructura salarial abierta o muy transparente. Por otra parte, el informe refleja que todavía existen diferencias en la percepción sobre la brecha salarial de género. El 35% de las mujeres cree que existe una brecha en los sueldos dentro de su empresa, frente al 14% de los hombres.

Si bien la confianza de los empleados puede ser frágil en lo relativo a la transparencia salarial, el estudio también recoge señales positivas que indican que las empresas parecen avanzar en la claridad de sus comunicaciones sobre aspectos clave, como la productividad o los desafíos a los que se enfrentan. Esto es relevante, ya que los profesionales demandan saber con precisión qué cambios se avecinan.

Pero, por su parte, el rechazo a un ascenso se debe a que las tareas o una mayor responsabilidad no es interesante, ni para jóvenes ni para el resto de trabajadores. «Nadie quiere ser ni director, ni jefe de estudios ni secretario, porque conlleva una sobrecarga de trabajo muy fuerte y se trata de un esfuerzo que queda oculto». O lo que es lo mismo; «No sería jefe ni por todo el dinero del mundo».

SE PRIORIZA LA FLEXIBILIDAD Y UN TRABAJO ACORDE A LOS VALORES DEL EMPLEADO

Jornadas interminables, trabajar los fines de semana, asumir toda la responsabilidad y el liderazgo de un departamento y lo que eso significa… Dar lo máximo de ti y tener que dar explicaciones por otra gente.

La ambición silenciosa pone por encima de la posibilidad de ascender, la satisfacción de necesidades personales: por eso prioriza la flexibilidad, un trabajo acorde a los valores del empleado y un sentido de la trascendentalidad dictado y establecido por ti.

Por otro lado, la ambición silenciosa refleja un cambio en la mentalidad y una divergencia en la forma en la que concebimos lo que es el éxito, y por ende, el sentido de la vida. Llegar a lo más alto ya no es la regla. 

Los jóvenes quieren revelarse ejerciendo control sobre lo que sí tienen poder: el tiempo. Mejores condiciones laborales, es decir, mayor flexibilidad en horarios y espacio, que son dos prioridades para la generación Z, y la posibilidad de desconectar al terminar la jornada laboral, son cosas a las que se tendría que renunciar si se pone por delante la posibilidad de que los trabajadores puedan ascender en el trabajo.

Publicidad