Especial 20 Aniversario

Rajada histórica de Simeone tras la eliminación del Atlético en el Mundial de Clubes

El Atlético de Madrid de Simeone luchó hasta el final, pero el esfuerzo no alcanzó. A pesar de sumar seis puntos, al igual que París Saint-Germain y Botafogo, la diferencia de gol terminó dejándolo fuera del Mundial de Clubes. El golpe más duro fue esa derrota en el debut ante el conjunto francés por 4-0, un marcador que terminó pesando como una losa.

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En la última jornada del grupo B, los dirigidos por Diego Simeone vencieron 1-0 a Botafogo, pero el resultado no fue suficiente. Necesitaban ganar por tres goles para avanzar. El equipo mostró entrega, personalidad y carácter, pero se topó con un rival bien plantado, que supo cómo resistir.

Simeone Fuente: @Atleti
Fuente: @Atleti

Botafogo planteó un partido inteligente. Manejó la pelota con criterio, cerró los espacios y complicó al conjunto español durante casi todo el encuentro. El gol de Antoine Griezmann en el tramo final dio algo de esperanza, pero la reacción llegó demasiado tarde para cambiar el destino.

Frustración y crítica desde el banco de Simeone

La cara de Diego Simeone al terminar el encuentro lo decía todo. El técnico argentino no escondió su frustración. Valoró la actitud de sus jugadores, pero no dudó en apuntar contra el arbitraje, especialmente por una jugada que, a su entender, pudo cambiar el rumbo del partido.

En el primer tiempo, Julián Álvarez cayó en el área tras un contacto con un defensor brasileño. El árbitro César Ramos fue al VAR para revisar la acción, pero terminó anulando la posibilidad de penal por una supuesta falta previa de Alexander Sorloth. Para Simeone, esa decisión fue clave.

Simeone recordó que algo similar ocurrió en el duelo ante PSG, dejando entrever que su equipo no fue tratado con el mismo criterio. Aunque evitó entrar en polémicas mayores, dejó claro que se sintió perjudicado por decisiones arbitrales. Aun así, no restó méritos a Botafogo y elogió su valentía y orden táctico.

Un gol tardío y muchas chances desperdiciadas para el equipo de Simeone

Desde antes del partido, en el entorno colchonero sabían lo que se necesitaba. Ganar, pero hacerlo con contundencia. Julián Álvarez lo dijo en la previa. No bastaba con tener la pelota o generar juego, había que concretar. Y ahí estuvo el principal problema del Atlético de Madrid. El equipo generó varias oportunidades claras, pero la puntería falló en momentos clave.

La más clara fue en la primera mitad, cuando el propio Álvarez remató solo frente al arco y su disparo se fue desviado. Esa jugada se convirtió en símbolo de la noche. Ocasiones sin final feliz. El único gol llegó recién a los 87 minutos, tras una buena combinación entre Álvarez y Griezmann. El francés definió con calidad, pero ya era tarde.

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Con ese tanto, el Atlético ganó, sí, pero quedó fuera. París Saint-Germain se quedó con el primer lugar del grupo, mientras que Botafogo, gracias a su orden defensivo y su eficacia, se aseguró el segundo boleto. El conjunto español se despide del torneo con la sensación amarga de haber hecho mucho sin obtener recompensa. Las oportunidades estuvieron ahí, pero se esfumaron entre errores propios y decisiones externas. Una eliminación que duele, no por falta de entrega, sino por no haber sabido convertir esfuerzo en goles.

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