El día de ayer, durante una nueva emisión de la tertulia en ‘El hormiguero’, se vivió uno de los momentos más sinceros y graciosos del programa. Los habituales colaboradores habían estado repasando los episodios más vergonzosos de sus carreras artísticas, cuando Marrón ánimo al presentador a través de una indirecta que terminó convirtiéndose en una confesión pública por parte de Pablo Motos.
Sin tapujos, pero sí con mucho humor, el presentador del favorito de Antena 3 confesó lo que considera su peor trabajo en la industria del espectáculo. Lo calificó como un «trauma», y aunque la acción fue bien recibida en ese momento, el final de la transmisión se convirtió en un recuerdo del que hoy se ríen, pero que entonces generó incomodidad.
3La autocrítica y el valor de contar los errores

De los aspectos que se pueden destacar de este segmento en ‘El hormiguero’ es la naturalidad con la que Pablo Motos abordó el error. No solo aceptó la anécdota de Marrón, sino que lo completó con información que dejaban claro que lo recordaba con claridad y sobre todo con vergüenza. Este tipo de experiencias acercan al presentador a la audiencia, mostrando que, como cualquier otro profesional, también ha tenido momentos fallidos en su carrera, un elemento diferencial que destaca al programa de Antena 3.
El tono con el que desarrollaron la tertulia fue distendido, pero al mismo tiempo funcionó como una especie de reflexión sobre cómo la ambición, sin planificación realista, puede tener como consecuencias resultados poco favorables. El público que sigue habitualmente el programa ya conoce el estilo autocrítico de Motos, pero no es frecuente que hable de sus errores del pasado con tanta honestidad. Este tipo de situaciones hacen que ‘El hormiguero’ mantenga su conexión con la audiencia y que siga siendo el favorito de la franja, superando a ‘La Revuelta’.