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¿Cuántos huevos se pueden comer al día sin perjudicar la salud? La ciencia responde y desmonta viejos mitos

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Durante décadas, los huevos ocuparon un lugar conflictivo en nuestras mesas. Se les miraba con recelo, se les restringía con normas casi quirúrgicas y se les culpaba de elevar el colesterol como si fueran villanos disfrazados de desayuno. Pero hoy, los expertos en salud de Estados Unidos reabren el debate con una contundente afirmación: no solo no hay motivo para temerlos, sino que este alimento podría ser clave para mejorar nuestra salud cardiovascular. ¿Cuántos huevos se pueden comer al día sin poner en riesgo el bienestar?

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En un escenario alimenticio donde predominan los ultraprocesados, los refrescos azucarados y las prisas, el huevo resurge como un aliado silencioso, lleno de nutrientes, barato y versátil. Y lo más interesante es que, según varios estudios recientes, incluso podría ayudarnos a prevenir enfermedades como el ictus o accidente cerebrovascular.

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Estados Unidos redescubre el huevo: de villano a héroe alimenticio

Estados Unidos redescubre el huevo: de villano a héroe alimenticio
Fuente: Agencias

En Estados Unidos, el huevo ha protagonizado un giro radical. En un país donde los problemas de salud relacionados con la alimentación afectan a millones de personas, incorporar un huevo al día puede marcar una gran diferencia. No se trata de una moda, sino de una recomendación basada en evidencia científica.

“El huevo, cocido o en revuelto, es mucho más saludable que muchas de las opciones ultraprocesadas que hoy dominan la dieta estadounidense”, explica la doctora López Sobaler. “Su aporte nutricional es altísimo y su coste, muy bajo”.

Además, el huevo tiene una ventaja que lo vuelve ideal en cualquier dieta: produce saciedad sin añadir grasas en exceso. Esto significa que puede ser útil en planes para perder peso o controlar la ingesta calórica.

Un solo huevo aporta cerca de 48 kcal y contribuye a mejorar el equilibrio entre el colesterol HDL (bueno) y el LDL (malo). Es decir, no solo no eleva el colesterol de forma perjudicial, sino que ayuda a mantenerlo en niveles saludables. En este sentido, no es exagerado decir que el huevo podría ser una pieza fundamental en la lucha contra una de las epidemias del siglo XXI: la obesidad.

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