En un momento en que las políticas migratorias se encuentran en el centro del debate público, Podemos ha dado un paso al frente para exigir al Gobierno una respuesta contundente. Pablo Fernández, responsable de Organización del partido y su coportavoz, ha lanzado un llamado a la acción, solicitando la regularización de al menos un millón de migrantes que residen y trabajan en España.
Fernández argumenta que España «necesita y precisa más trabajadores y trabajadoras con derechos» y que la presencia de migrantes no debe ser vista como un problema de seguridad, sino como una oportunidad para fortalecer la sociedad y la economía. El dirigente de Podemos ha criticado duramente a aquellos que consideran la migración como un asunto de «orden público», acusándolos de promover «discursos de odio» y «bulos».
La Iniciativa Legislativa Popular: Un Camino hacia la Regularización
La posición de Podemos se basa en la Iniciativa Legislativa Popular (ILP) que se encuentra en trámite parlamentario para regularizar a medio millón de migrantes que residen desde hace años en España. Fernández ha instado al Gobierno a aprobar esta medida de una vez por todas, señalando que, en caso de no contar con los apoyos necesarios, debería proceder a regularizar directamente a un millón de personas en situación irregular.
El líder de Podemos ha sido enfático al afirmar que «no hay seres humanos ilegales» y que España debe regularizar a estas personas migrantes «de una vez por todas». Considera que la actual Ley de Extranjería y el Pacto Europeo de Migración y Asilo son normativas que «criminalizan a las personas migrantes» y las tratan como un problema de seguridad, cuando en realidad deberían ser abordadas desde una perspectiva humanitaria, basada en el respeto a los Derechos Humanos.
La Lucha contra el Discurso del Odio y los Bulos
Además de exigir la regularización de los migrantes, Podemos también ha hecho un llamado al Gobierno para que actúe contra los «discursos de odio» y los «continuos bulos» promovidos por la ultraderecha. Fernández ha mencionado específicamente a figuras como Alvise, Albiol y Vox, a quienes ha calificado como «racistas miserables» que esparcen sus «discursos de odio».
La posición de Podemos refleja una visión que prioriza la justicia social, la inclusión y el respeto a los Derechos Humanos en el ámbito de la política migratoria. Al plantear la regularización de un millón de migrantes y al denunciar los discursos de odio, el partido se posiciona como un defensor de los derechos de las personas en situación de vulnerabilidad y como un actor fundamental en el debate sobre la inmigración en España.