martes, 30 abril 2024 16:20

La traición imperdonable de Luka Modric al Real Madrid para rematar su carrera

Los planes del croata no van a sentar demasiado bien en la afición madridista

Luka Modric asiste casi con total seguridad a su última temporada en el Real Madrid. Su protagonismo ha ido desapareciendo hasta el punto de que ya nadie se sorprende cuando ven al 10 en el banquillo. El croata es y será una leyenda del Real Madrid, pero los planes que tiene para poner el broche a su exitosa carrera van a generar críticas. Y con razón.

Luka Modric no renovará y abandonará el Real Madrid a final de temporada. Hasta ahí todo en órden. Sin embargo, el croata pasará a compartir experiencias, vestuario y vida con varios ex jugadores del FC Barcelona. Jugadores con los que ha tenido sus más y sus menos. Hablamos de Messi, Busquets, Jordi Alba y Luis Suárez. Inter de Miami, de la MLS.

Luka Modric
Modric Se Va

Luka Modric se va a Miami

Desde hace tiempo se venía especulando sobre el futuro de Luka Modric en el Real Madrid. A pesar de su destacada trayectoria y su indiscutible calidad, su papel en el equipo dirigido por Carlo Ancelotti ha ido disminuyendo progresivamente en las últimas jornadas. Es cuestión de tiempo que se anuncie su salida del club.

Luka Modric, Balón de Oro en 2018, dejará atrás doce temporadas vistiendo la camiseta blanca, dejando un legado imborrable en la historia del club. Un jugador muy querido y respetado, incluso por sus rivales. Pero que dejará el mal sabor de boca de irse a un proyecto marcado por el estilo del Barça.

Miami quiere hacer historia en la Concacaf

Inicialmente, Modric tenía la intención de continuar su carrera en Europa. Sin embargo, la insistencia de David Beckham, propietario del Inter de Miami, ha resultado determinante en su decisión. El exjugador inglés ha sabido seducir al centrocampista croata con un proyecto deportivo ambicioso y una oferta económica tentadora.

Es evidente que cualquier jugador, y mucho más una leyenda como Modric, se merece elegir su futuro. Pero el hecho de ver al croata celebrar un gol con Jordi Alba o Luis Suárez, sentará como una patada en el estomago a cualquier madridista que tenga un mínimo de pasión.