El sector de la lavandería industrial es muy desconocido para el gran público, que solo ve las máquinas que se ponen en esos centros de autoservicio que funcionan con monedas.
Sin embargo, todos los años llegan novedades a esta industria, que avanza gracias a la tecnología y a Internet, por lo que se pone al día con el fin de ser más productiva.
Lavadoras con IoT
El IoT (Internet of Things) o el Internet de las Cosas, por su traducción al español, ya se puede incluir en una lavadora de ropa industrial, que ahora está conectada y “habla” con otros dispositivos a través de sus sensores.
Esto tiene muchos usos, pero uno de los principales es la posibilidad de hacer diagnósticos a distancia. Así, el personal del servicio técnico se va a poder conectar a las lavadoras en remoto para saber qué es lo que les pasa antes de desplazarse.
Algunas averías se solucionarán sin que el técnico tenga que ir de manera presencial, otras las solventarán los empleados, y cuando el especialista se desplace ya sabrá qué le pasa a la lavadora antes de retirar el primer tornillo.
Con el fin de facilitar su manejo, no es extraño que estas lavadoras lleven grandes pantallas táctiles de siete pulgadas, el tamaño de una tablet, lo que hace que interactuar con ellas sea muy sencillo.
También tienen microprocesadores, de manera que se pueden “actualizar” modificando los parámetros con los cuales están funcionando, mejorándolos o adecuándolos al trabajo de cada lavandería.
Armarios de ozono para desinfectar la ropa
Desde que se inició la pandemia del covid, todos nos hemos concienciado de lo importante que es la desinfección. Aquí también entra la ropa, de forma que en la lavandería industrial ahora es posible colocar un armario que usa el ozono como desinfectante.
Esta molécula no solo mata a todos los virus y las bacterias, sino que elimina los olores del tabaco, el sudor, el humo, etc. Por eso, es la máquina ideal a la hora de tratar prendas que no se pueden meter en lavadoras convencionales.
Aquí, hablamos de sombreros, gorros, colchas, cortinas, etc. Todas quedarán limpias, sin olores ni agentes patógenos después de un ciclo en uno de estos armarios.
Las secadoras de ropa de gas cada vez están más presentes
A nivel industrial se utiliza mucho la secadora de ropa a gas, más desde que hace un par de años el precio de la electricidad se disparó.
El gas tiene un poder calorífico enorme y un mayor rendimiento que la electricidad, de manera que en estas máquinas se emplea como combustible para hacerlas funcionar, en especial en las de gran tamaño.
Además, secan más ropa que las eléctricas en una menor cantidad de tiempo. De hecho, algunas de estas máquinas poseen dos tambores y una función turbo, así que su productividad es enorme si la comparamos con la que nos da una secadora eléctrica. Si no se empleaban más antes es porque las que funcionan con electricidad son más simples.
