El término metrosexual, ¿de dónde procede?

El periodista británico Mark Simpson acuñó en 1994 el término «metrosexual» para designar al creciente número de varones que utilizaba regularmente productos cosméticos. «Metrosexual» venía de metrópoli, pues Simpson situaba al consumidor de perfumes y lociones en las grandes ciudades.

Las empresas de marketing y cosmética se apresuraron a fijarse en este grupo emergente que abría nuevas posibilidades de mercado. En 2003 se dio otra vuelta al asunto, en EE.UU, y el término pasó a designar a los tipos sensibles con cierto estilo de vida.