Desde el pasado mes de abril, España quiso poner fin (o intentarlo) a la problemática crisis de los elevados precios del combustible, provocados por la guerra intensa y prolongada entre Rusia y Ucrania. Ante ello, el Gobierno optó por subvencionar el precio de la gasolina.
Y es que, en un momento, este conflicto propició, no obstante, que los españoles llegaran a pagar más de 2 euros por el litro de combustible, llegando a las cifras más altas de nuestra historia.
Por ejemplo; a mediados del mes de marzo, los conductores españoles tenían que desembolsar más dinero para llenar el depósito de sus automóviles. En el caso de un coche impulsado con gasolina sin plomo 95 y con un depósito con una capacidad de 55 litros, llenarlo implicaba pagar algo más de 90 euros.
La ayuda de los 20 céntimos a la gasolina llega a su examen final este diciembre
De esta manera, el Ejecutivo optó por la conocida ayuda de los 20 céntimos al combustible. Esta consistía, por su parte, en una subvención de 20 céntimos de euro por litro de carburante, de los que 15 céntimos corresponden al Gobierno y los 5 céntimos restantes corren a cargo de las estaciones de servicio.
En este sentido, por su parte, tiempo después conocíamos que tenía algunos entresijos. Y es que esta subvención al combustible, y que se veía como una rebaja, se terminaba pagando vía impuestos y que después hay que devolver a las empresas que están sufragando los 5 céntimos como mínimo a los que están obligadas. Los otros 15 céntimos lo paga el contribuyente.
Como tal, este descuento sobre el precio de la gasolina y el diésel terminaba el 30 de junio y, aunque la ministra portavoz del Gobierno, aseguraba que se mantendría hasta el 30 de septiembre, finalmente, Pedro Sánchez comunicó seguirá hasta el 31 de diciembre… pero del que se verá a pasar un examen, probablemente el último.
Un plan de respuesta que no parece volver a prorrogarse debido a las altas consecuencias económicas
Porque la cosa no quedaba ahí. Este resultó como un plan de respuesta que contó inicialmente con un presupuesto de 16.000 millones de euros, con 6.000 millones en ayudas directas y rebajas de impuestos y otros 10.000 millones en créditos ICO.
Así las cosas, la fecha marcada en el calendario por el Gobierno como fin de la bonificación de 20 céntimos es el próximo 31 de diciembre. Todo apunta a que no se volverá a prorrogar esta medida, ya que, de momento, no aparece en los Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2023, con lo que tocará esperar
En total, se calcula que al Gobierno español le costará 1.400 millones de euros ofrecer estas subvenciones a los ciudadanos españoles, en su mayor parte correspondiente a la bonificación de 15 céntimos por litro que corre a cargo de los Presupuestos. De ahí que todo indique que, a estas alturas, al Gobierno se le haya ido un poco de las manos…
La cercanía de las elecciones de 2023 podrían hacer por cambiar de parecer
Con todo, desde la Presidencia del Gobierno se inste la finalidad de mantener esta rebaja en el precio de los carburantes, junto con otras medidas, con el fin de «proteger a las familias, empresas e industrias de nuestro país frente al alza de los precios».
Es entonces cuando, a pesar de que la medida no saldría a cuenta, sobre todo a económicas, hay varias partes del Gobierno que instan a que esto sí se siga haciendo y que se continúe subvencionando la gasolina, al menos, unos meses más allá de diciembre.
¿El motivo? Las elecciones vistas que llegan en 2023, tanto las municipales del mes de mayo, las 13 autonómicas de esas mismas fechas, como también las generales al cargo de la Presidencia del Gobierno, que tendrán lugar el día 28 de noviembre.
De todas formas, esta última decisión se llevará a cabo del que será la situación del mismo coste de los combustibles. En cifras, y si comparamos fechas como las del mes de julio, el litro de 95 llegó a pagarse en promedio a 2,036 euros, mientras que esta última semana los precios se quedan (por el momento), en 1,640 euros.
